La Aduna dictó este miércoles la Resolución General 4914/2021, mediante la cual se establecieron valores de referencia parta las exportaciones de carne vacuna a un grupo de países entre los que figura China, que absorbe casi 80% de los envíos. La decisión tiene que ver con evitar “operaciones de subfacturación en las exportaciones” en un negocio que el año pasado batió récords, con más de 900 mil toneladas exportadas por unos 2.500 millones de dólares.
Entre estas posibles maniobras figura el tratar de detener el llamado “rulo cambiario”, que consiste en declarar un valor menos por los embarques de carne, para así dejar parte de dinero obtenido en el exterior, en dólares, evitando la liquidación obligatoria que deben hacer los exportadores de las divisas en el mercado mayorista de cambios, donde reciben pesos al tipo de cambio oficial.
En la resolución, como ya hizo en otros rubros, la Aduana fijó precios de referencia debajo de los cuales no aceptaría exportaciones de carne vacuna, que van desde 1,5 dólares por kilo a 4,4 kilos, dependiendo el tipo de corte y la modalidad del embarque (carnes enfriadas o congeladas). Son valores que están por debajo de los habituales del mercado.
Varios países de destino de esos cargamentos parecen un chiste, pues la Argentina no tiene habilitación sanitaria para vender o recién la está obteniendo. Es el caso de Corea, Filipinas, Japón, Taiwán y Thailandia. Pero en esa pequeña lista figuran China y Hong Kong (muchas veces la puerta de entrada a China). De las 911.000 toenladas enviadas en 2020, Esos dos mercados representaron casi el total de los embarques de carne vacuna. Al margen quedan la cuota Hilton para Europa, y otros destinos importantes como Estados Unidos, Israel o Chile.
“Los valores de referencia habían sido desarticulados durante el gobierno anterior y la DGA definió restablecerlos. Permite desarticular posibles maniobras de evasión de impuestos y prácticas abusivas que afectan el ingreso de divisas al mercado cambiario”. señaló sin rodeos la Aduana en una comunicación.
La medida se conoce a pocas horas de que el gobierno acordara con las cámaras de la industria frigorífica que nuclean a las empresas exportadoras un acuerdo para congelar el precio de diez cortes de consumo popular, que se venderán en supermercados a los valores de diciembre pasado. Implica un volumen moderado de carne subsidiada (unas 6.000 toneladas mensuales frente a un consumo promedio de 200 mil toneladas). Pero para los frigoríficos que participan resulta resignar ingresos por unos 600 millones de pesos mensuales, a razón de 100 pesos por kilo.
De todos modos, la Aduana consideró que el restablecimiento de precios de referencia para los embarques del sector no colisiona con ese acuerdo. Por el contrario, “la medida se conjuga con el acuerdo que alcanzó el gobierno con las cámaras de frigoríficos, carnicerías y supermercados para garantizar el abastecimiento del mercado interno”.
En realidad, salvo que se fijen en valores ridículamente altos, estos valores referenciales no tendrían por qué detener el flujo exportador. En otros sectores donde ya se aplicaron, no hubo alteraciones. Arándanos, leche en polvo, cebolla, papa, pasas de uva y corvina son otros productos donde les autoridades aduaneras decidieron intervenir para evitar maniobras de subfacturación.