Luego de conocerse los últimos datos de la Red Nacional de Monitoreo de Dalbulus maidis que es coordinada por Maizar, están modificándose las estimaciones iniciales sobre la siembra de maíz y hay perspectivas de un aumento de las hectáreas implantadas con variedades tardías.
Al menos eso es lo que creen en el sector semillero, donde se muestran predispuestos a este mejor escenario para el maíz en Argentina, luego de que la chicharrita y el complejo de enfermedades que traslada provocara en la campaña 2023/24 la pérdida de casi 12 millones de toneladas de maíz. Ahora, en cambio, el monitoreo muestra que “existe una nula presencia de la plaga en algunas zonas y baja o escasa en otras”.
En este contexto, el agrónomo Agustín Sosa, gerente de Semillas de ACA (Asociación de Cooperativas Argentinas), consideró que “la baja aparición de la chicharrita puede impulsar la siembra de maíz”.
Además, desde ACA señalaron que “al ubicar el período crítico del cultivo en un momento del año con menor demanda atmosférica, se logra un muy buen piso de rendimiento”.
Otra de las razones que subrayaron es que, “si bien no tiene el altísimo potencial de un maíz temprano, el tardío puede alcanzar un alto potencial productivo si se lo acompaña de un manejo adecuado, en donde el híbrido y la nutrición sean claves”.
Además Sosa destacó que el maíz tardío como opción, “haciendo los números, esta campaña tiene una mejor rentabilidad que otros cultivos de verano”. A esto sumaron que “la mayor fertilidad inicial del suelo permite aprovechar, sobre todo, el nitrógeno”.
Por ahora, la Bolsa de Comercio de Rosario estima que se implantarían casi 8 millones de hectáreas con maíz en la campaña 2024/25, lo que podría traducirse en una producción de entre 51 y 52 millones de toneladas.
En este escenario de recuperación de las proyecciones, ACA indicó que cuenta con una propuesta integral que contempla asesoramiento, híbridos, fitosanitarios y fertilizantes, junto a importantes chances de financiamiento. “Estamos cerca de las Cooperativas, asesorando y acompañando para que los productores tomen las mejores decisiones. Contamos con híbridos con tecnología Trecepta y Víptera CL, entre los que se destacan los 476 y 473”, detalló Sosa.