¿Puede la protección especies silvestres como pumas, zorros y gatos andinos mejorar la cotización de venta de la lana ovina? De acuerdo con una reciente experiencia realizada por la Cooperativa Agropecuaria de Comercialización de Pequeños Productores de la Zona Centro de Neuquén, ubicada en Zapala, todo parecería indicar que sí.
A partir de la certificación internacional “Wildlife Friendly” otorgada en el país por WCS Argentina (Wildlife Conservation Society), 45 productores de esa cooperativa lograron fortalecer el posicionamiento de sus fibras merino en el mercado internacional y obtuvieron un precio de venta un 15% superior.
La forma de obtener ese aumento fue a partir de la aplicación de prácticas amigables con la biodiversidad de la estepa patagónica, así como con el cuidado de la fauna nativa y su coexistencia con el ganado ovino, algo que empieza a ser valorado por las textiles a nivel internacional.
A través de un trabajo conjunto con la Subsecretaría de Producción de Neuquén y el INTA, se desarrollaron metodologías de manejo que permitieran cumplir con esos objetivos. En concreto, se emplearon métodos para controlar la depredación de las ovejas como los perros protectores de ganado, que demostraron la reducción de daños de 95% por los ataques a las majadas.
“La efectividad de los perros protectores fue demostrada de manera contundente y con esos resultados se promovió la creación de criaderos para la provincia y se lanzaron líneas de crédito muy accesibles para que productores y productoras puedan adquirirlos. De esta manera, se promueve una metodología que resulta muy beneficiosa, tanto para el productor como para el ambiente”, dijo Marcos Lauge, director de Ganadería y Salud Animal de la Subsecretaría de Producción de Neuquén.
“Los ataques de depredadores (en especial pumas o perros asilvestrados) son comunes y las pérdidas son importantes. Adoptamos la herramienta porque toda la vida se cazó y se armaron trampas, pero nunca se logró reducir las pérdidas. Con el perro se puede convivir con los carnívoros y también se protege lo que uno produce”, aportó Flavio Castillo, un productor de la zona.
A esto se sumaron estrategias para favorecer el pastoreo regenerativo y restaurar los suelos y pasturas locales, además de disminuir la carga ganadera evitando el sobrepastoreo.
Todo esto llevó a que la certificación “Wildlife Friendly” fuera declarada de Interés Provincial por la Cámara Legislativa de Neuquén en 2021.
“Las prácticas sustentables sobre la ganadería ovina potencian la calidad de la lana y son valoradas por un sector de la industria textil interesado en ofrecer prendas tejidas con fibras naturales, como alternativa a las sintéticas. El origen de las fibras y su modo de producción representan un diferencial para diseñadores y empresas textiles comprometidas con el ambiente. A la vez, los consumidores, el último eslabón de la cadena, se interesan cada vez más por los productos certificados en calidad y sustentabilidad”, indicaron desde WCS Argentina.
“Es muy gratificante que, además de sumarse a la conservación de la estepa, los productores puedan ahora lograr un beneficio concreto como es obtener un mayor ingreso por su trabajo, aportando además a la mejora del mercado de la lana natural”, señaló por su parte Ezequiel Infantino, coordinador de Certificación y Cadenas de Valor de WCS Argentina.