Tal como anticipó Bichos de Campo, al Banco Central renovó los “estímulos” para que los productores agrícolas liquiden rápidamente su cosecha y no conserven los silobolsas de soja y maíz en sus campos, como suele suceder ante la incertidumbre cambiaria y la elevada inflación que reina en la economía.
La autoridad monetaria, en un comunicado, informó que mejoró las condiciones para una herramienta financiera que denomina “los plazos fijos chacareros”, y que consiste en un plazo fijo convencional en dólares, pero que en el caso de productores y empresas agrícolas ofrecerá tasas variables atadas al valor de los cereales y oleaginosas y la cotización del dólar.
De ese modo, argumentan las autoridades del BCRA, el productor podrá vender sus granos y no correr riesgos por almacenarlos en el campo, ya que constituyendo con el dinero este plazo fijo se aseguraría conservar tanto el valor del grano como prevenirse de movimientos devaluatorios.
Vale recordar que el productor produce un grano que cotiza en dólares (porque tiene un valor internacional de referencia), pero está obligado a cobrar su venta en pesos al valor del dólar mayorista Banco Nación del día de la venta. Por eso, para no quedarse calzado en pesos que rápidamente pierden su poder de compra, es que muchos chacareros eligen desprenderse solo del grano que necesiten, y mantener la mercadería física, aunque sea dentro de un bolsón plástico en medio de la intemperie.
“La condición establecida es que el monto (del plazo fijo a constituir) no supere hasta dos veces el valor total de las ventas registradas este año”, indicó un comunicado del BCRA al dar a cuenta de una flexibilización a favor de los productores respecto de la operatoria vigente. ¿Cuál es? Pues que el Banco Central ordenó a los bancos “que se admita la renovación de esas inversiones a plazo existentes a la fecha por hasta el monto a cobrar a sus vencimientos sin tener en cuenta ese límite de manera de mantener el incentivo a la venta de la cosecha”.
Además el Directorio del BCRA decidió elevar el monto para el acceso al financiamiento en pesos de las empresas agroexportadoras, destinado a la compra de granos para exportación, a 15.000 millones de pesos cuando los controlantes sean residentes en el país.
En este contexto, el Banco de la Nación Argentina (BNA) ya había anticipado su decisión de ofrecer nuevamente al sector agrícola la opción de inversión en depósitos a plazos fijos en pesos atados a la variación de la cotización del dólar.
“Para esta herramienta de inversión a plazo con retribución variable, la tasa de interés sobre el capital invertido se calculará en función de la variación en la cotización del dólar de dos días hábiles previos a la fecha de imposición hasta dos días hábiles previos al vencimiento”, explicó el banco estatal que es el principal financista de los productores. Y aclaró: “Si la variación resultase negativa, se aplicará tasa cero”.
“El capital a invertir es en pesos, atado al dólar, y el plazo de colocación cuenta con un mínimo de 60 días y máximo de hasta 370 días, por un monto mínimo de 1.500 pesos y un máximo de 500 millones, lo que no podrá superar el doble de las ventas totales del titular del depósito, en cereales u oleaginosas, registradas a partir del 1º de noviembre de 2019”, determinó el Nación.