Mientras el gobierno se parte en pedazos, tironeado entre dirigentes que no hablan entre ellos y que agudizan una crisis sin precedentes, el ministro de Agricultura, Julián Domínguez, aplica los principios del buen peronista: se muestra cómodo con todos los sectores y crea comisiones y subcomisiones para que -como decía Juan Perón- finalmente no cambie nada.
La Resolución 195/2022, publicada este lunes en el Boletín Oficial, es un buen ejemplo de ello: seguramente será bien intencionada en sus objetivos pero luce totalmente inconducente: creó una Comisión Nacional Asesora de Soluciones Tecnológicas para la Agricultura, la Ganadería y la Pesca, que seguramente se superpondrá con otras áreas de gobierno (como el Ministerio de Ciencia y Técnica o el propio INTA)
¿De qué se trata? En sus fundamentos, la norma firmada por Domínguez explica que “el desarrollo de nuevas tecnologías específicas para los sectores de la agricultura, la ganadería y la pesca (las llamadas AgTech) avanza de manera constante y sostenida, observándose un importante crecimiento emprendedor a nivel nacional”, con una estimación de 250 “soluciones tecnológicas” registradas.
En esta sintonía, Domínguez cree que hay que impulsar estas tecnologías o Agtech, porque será bueno para la Argentina. Pero al mismo tiempo aclara que ello “implica desafíos en cuanto a la determinación de las reales aplicaciones de dicha tecnología y la disponibilidad en el acceso a las mismas para los actores de los eslabones de las diferentes cadenas productivas, advirtiéndose que existen numerosas áreas donde se identifica como insatisfecha la oferta de aplicaciones.
Tras disponer la creación de nueva Comisión Nacional Asesora, que dependerá directamente del subsecretario de Agriculura, Delfo Buchaillot, la resolución determina cuáles serán sus funciones:
- Asesorar al Ministerio sobre los temas referidos a Soluciones Tecnológicas para la Agricultura, la Ganadería y la Pesca, comúnmente denominadas “Agtech”.
- Estudiar las necesidades tecnológicas de esos sectores a fin de unificar criterios, prioridades y acciones, con el objeto de proponer políticas y proyectos específicos.
- Confecciones una base de datos con las AgTech existentes.
- Poner a disposición de los sectores involucrados esa lista.
- Fomentar la creación de espacios de vinculación que favorezcan el diálogo entre empresas de base tecnológica y productores.
- Evaluar la creación de una marca que, a través de un sello, símbolo o logotipo, identifique los atributos de las innovaciones Agtech de desarrollo nacional.
- Facilitar el acceso a la información relacionada con las tecnologías Agtech a los eslabones de las diferentes cadenas.
Pero no conforme con ello, Domínguez también dispuso crear una subcomisión dentro de la comisión. “Créase, en el ámbito de la Comisión Nacional Asesora de Soluciones Tecnológicas para la Agricultura, la Ganadería y la Pesca, el Grupo Técnico de Trabajo para la promoción de Buenas Prácticas Agropecuarias”, dispone en su artículo 3° la resolución.
Este grupo técnico tendrá como función asesorar a la comisión asesora. Obviamente sobre “los temas referidos a las buenas prácticas agropecuarias, su promoción e implementación, y el desarrollo de innovaciones tecnológicas directamente vinculadas a las mismas”.
Vamos juntos, que ahora sí -AgTech mediante- un futuro venturoso nos espera.