Enrique Passarello pisa los 40 años y desde hace más de una década maneja un frigorífico que procesa carne porcina y fabrica embutidos y fiambres, y vende cortes de cerdo. Cuenta además con otro establecimiento en el que se organiza la logística comercial. Todo en la localidad entrerriana de Concordia, desde donde también sale mercadería para toda la provincia de Corrientes.
Su padre Reinaldo arrancó a fines de los años 60, sin un mango pero con mucha ilusión. Cuenta Enrique que su viejo con solo 15 años “sacó a relucir su incipiente espíritu emprendedor que lo llevó a faenar unos pocos cerdos cuya carne vendió a familiares y amigos. Ese adolescente daba, a inicios de los años 70, el primer paso de lo que sería una larga recorrida en la producción de carne de cerdos”, destacó.
Reinaldo le tomó el gusto a la cuestión, sumó clientes, negocios y terminó poniendo una carnicería. Luego se casó y nació Enrique, que también se sumó al emprendimiento familiar a temprana edad. La historia de la empresa fue de la mano de la historia de la familia.
Ahora con 41 años, Enrique maneja una empresa de 17 empleados, aunque planea en el futuro contratar más porque “planes de crecimiento hay y los iremos concretando”, indicó. La firma lleva su nombre: Frigorífico Pasarello Saverio Enrique pero los productos salen bajo la marca Don Mateo.
“Tanto en la fábrica como en la distribuidora cuentan con la autorización del Senasa para el tránsito federal de la mercadería. Eso fue un logro importante ya que nos permitió expandir el negocio. Además, la aprobación de parte del ente sanitario nacional significó que estábamos haciendo las cosas bien”, explicó el empresario.
Luego recordó cómo fue el recorrido de esta empresa familiar: “La faena de cerdos de mi papá fue creciendo, puso primero una carnicería y luego pudo organizar un frigorífico.
Posteriormente se dio la posibilidad de dar un salto más: “A inicios de los años 2000 surgió la posibilidad de armar una planta en el parque industrial de esta localidad, pero se tuvo que abandonar por la crisis de 2001. Nos levantamos de esa piña y rearmamos la empresa en ese mismo parque industrial. Luego armamos la distribuidora dentro de la ciudad de Concordia”.
En Argentina la apuesta de los Passarello por los cerdos está dando buenos resultados, hace unos 20 años el consumo de carne porcina era de 5 kilos por habitante al año. Ahora llega a 20 kilos. Eso lo ayuda a ser más optimista.
“Esperamos que el consumo siga aumentando y para eso nos preparamos con más inversiones que nos permitan producir y comercializar más”.