La baja de derechos de exportación anunciada por Javier Milei en la Exposición Rural, pero sobre todo la mejora del valor del dólar de las últimas semanas, le devolvieron competitividad a las exportaciones de carne vacuna.
Durante varios meses el “dólar carne”, que surge de quitar las retenciones (estaban en 6,75% y se redujeron a 5%) al valor mayorista de la divisa estadounidense, se ubicó en el piso de la banda e incluso en algún momento estuvo debajo de los 1.000 pesos.
En las últimas semanas la situación se modificó notablemente. El dólar carne ronda ahora los 1.250 pesos, y así su valor mejoró al menos 20%, lo que significa una mejora significativa en las condiciones cambiarias para la exportación de carne vacuna.
Las exportaciones de carne vacuna se vienen recuperando luego de un muy mal arranque a inicios de año. En julio, según Senasa, los embarques habrían llegado a cerca de 80.000 toneladas y se esperan volúmenes altos en los meses próximos por la mayor demanda de China y de los Estados Unidos, así como debido a la mejora en la competitividad cambiaria.
Los cambios que se vienen dando permitieron que se pague más por la hacienda. La oferta de vacas con la que se alimenta a la demanda China este año se achicó 10% y en los meses próximos se reducirá todavía más respecto de lo que hubo en estos meses.
Esta categoría no deja de afirmarse en el Mercado Agroganadero de Cañuelas, donde sus precios aumentaron al menos 60% en los últimos dos meses.
También mejoró el precio del novillo, aunque menos que el dólar, por lo que su costo para la industria se redujo respecto de los picos que hubo este año. El novillo que se vendía a 5.000/5.100 pesos pasó a negociarse en 5.400/5.600 pesos por kilo en gancho lo que indica una mejora de 10%.
Pero si se mide su valor en dólares, pasó de 5 dólares por kilo res a 4,35 dólares. La baja fue de 15% y así su cotización quedó bien por debajo de la que hay en Uruguay, que ronda los 5,10 dólares y muy cerca de la de Paraguay, que es de 4,15.
En el caso de Brasil el valor del novillo es de 3,40 dólares. Su precio bajó por la imposición de nuevos aranceles por parte del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que prácticamente imposibilitan la venta de carne brasileña a ese mercado.