La diputada nacional por Jujuy, Carolina Moisés, destacó que el proyecto presentado por el Frente de Todos para modificar el marco regulatorio vigente para los biocombustibles desde 2006, y que prácticamente liquida la producción de bioetanol a partir del maíz, será beneficioso para el sector azucarero, ya que hasta diciembre de 2030 le otorgará estabilidad y permitirá a los ingenios “planificar la producción y propiciar el desarrollo de las economías regionales”.
Moisés es coautora de la iniciativa que anticipó hace varias semanas Bichos de Campo, junto a los diputados Marcos Cleri y Omar Félix. La iniciativa que cuenta con la bendición del kirchnerismo fue presentada el jueves en el Congreso, donde quedó trunco por falta de quorum el debate para prorrogar el régimen vigente, que vence los primeros días de mayo próximo.
“Este proyecto fue elaborado atendiendo las demandas y propuestas de los principales actores de la cadena de valor de las bioenergías y contemplando las necesidades de la economía nacional para maximizar el potencial de la Argentina en términos de productividad y generación de riqueza genuina”, exageró Moises.
De hecho, los actores del sector privado no fueron escuchados y mucho menos se oyó la voz de las provincias productoras de biocombustibles, que en una Liga habían presentado una iniciativa que está a las antípodas de las que propone ahora el oficialismo.
En una visible jugada por dividir la resistencia de esas provincias (y también contar con los votos de los diputados del norte azucarero) ese proyecto preserva los niveles de corte de las naftas con biocombustibles provenientes de la caña de azúcar, que hoy presenta 6%. Pero hace desaparecer casi por completo el bioetanol derivado del maíz, que se produce sobre todo en Córdoba y hoy aporte el otro 6%.
Para Moisés esto no es un problema sino una virtud para el sector azucarero. “Somos conscientes de que hemos defendido las fuentes de trabajo y a los productores y trabajadores del NOA”, se ufanó la diputada. En Jujuy, de donde proviene Moisés, está establecido hace más de cien años el ingenio Ledesma, el más grande del país.
Según este proyecto k, el nuevo marco regulatorio, que consta de 25 artículos, establece que el régimen de promoción estará vigente hasta el 31 de diciembre de 2030 y le otorga al Poder Ejecutivo la facultad de prorrogarlo por 5 años más. Pese a contar con media sanción del Senasa, el viejo régimen vencerá indefectiblemente a mitad de mayo.
Según la legisladora jujeña, “a 15 años de la sanción del régimen actual durante el gobierno de Néstor Kirchner, es mucho lo que se ha avanzado gracias a ese marco normativo que vence el próximo 12 de mayo”.
“La Argentina profundizó el desarrollo de esta nueva fuente de energía en un 400%, tanto que hoy existen unas 54 plantas de biocombustibles distribuidas en 10 provincias, que sostienen 65 mil hogares con puestos laborales”, añadió Moises, que omitió un pequeño detalle: la inmensa mayoría de estas 54 plantas elaboran biocombustibles en la región pampeana (los ingenios son los mismos de siempre) a partir de soja y maíz.
Son estas empresas las que de prosperar el proyecto kirchnerista quedarán descolocadas y casi fuera de la cancha.