Las sociedades rurales que integran el denominado Arco Noroeste de Córdoba avanzan en una fractura con sus similares del sur provincial. Un grupo grande de entidades ya formalizó su retiro de Cartez (la filial cordobesa de CRA) y coquetea con su adhesión a nivel nacional a la Sociedad Rural Argentina. Pero además han armado una agenda común de planteos dirigidos al gobierno provincial, que se distingue bastante de los planteos esgrimidos por las rurales ubicadas en las zonas donde domina la agricultura.
En este cisma visible, la semana pasada se reunieron en la Sociedad Rural del Oeste de Córdoba, en Villa Dolores, los presidentes de las Rurales de Jesús María, Pampa de Pocho, Cruz del Eje, Villa Dolores, Acipro y Arroyito, para definir esta agenda que está mucho más vinculada a la problemática ganadera y el manejo de bosques. Por eso se incluyen planteos sobre los incendios de montes, el ordenamiento territorial, los caminos rurales e incluso los casos de inseguridad rural.
Gaspar Larghi, presidente de Sociedad Rural anfitriona, habló desde Villa Dolores con el programa Colonia Agropecuaria, por AM 550, para explicar las motivaciones que guían la conformación de este grupo al margen de la histórica Cartez.
“Nosotros tenemos asociado el monte a la hacienda en la mayoría de los casos. ¿Y qué ocurre? En esta zona al tener mucho monte, tenemos muchos incendios. El gobierno de la provincia nos ha dado ahora una serie de requisitos (para evitar esos incendios). Tenemos que hacer picadas perimetrales de 10 a 15 metros, y picadas contra fuego. Pero a su vez el productor en este momento, a pesar de tener animales, hoy en día le está faltando el pasto, y los precios no son lo razonable a lo que uno espera, o sea que no tenemos el dinero suficiente para hacer dicha inversión”, comenzó Largui con la explicación.
Luego insistió: “No tenemos el dinero suficiente para hacer dichas picadas y pedimos que el gobierno nos ayude con esas picadas que quiere que tengamos, y nosotros las conservamos”.
-¿Hay algún plazo para hacer esas obras?
-Un plazo por el momento no hay, pero sí nos están exigiendo que tengamos las picadas perimetrales y las contrafuego en condiciones.
-Además está toda la discusión sobre el reordenamiento de la ley de bosques…
-Al bosque es una suerte tenerlo, y realmente lo protegemos y lo queremos. Los que somos de la zona realmente cuidamos los árboles añosos. Nosotros lo que pedimos en ese caso es que nos permitan sacar los fachinales para poder hacer unas pasturas megatérmicas, porque la capacidad de recepción de los campos aumenta muchísimo. No te olvides que aquí los campos tienen una receptividad en campo de monte de 20 hectáreas aproximadamente por cada animal. Teniendo esto que pedimos, pudiendo hacer megatérmicas, tendríamos una capacidad 1 a 1, o sea, una hectárea, un animal.
-¿Se podría multiplicar por 20 la capacidad de recepción de los campos?
-Bueno, así de claro. Pero habría que ser más flexible y tolerante con el tipo de conservación que se quiera hacer. Nosotros proponemos sacar todo lo que sea fachinal, lo que no sirve, y dejar todos los árboles añosos, porque realmente eso nos ayuda muchísimo contra el sol en verano. No te olvides que acá hacen de 45 a 50 grados en verano.
-¿Qué otros temas en común tienen en la agenda de las rurales?
-Acá se ha incrementado bastante la parte del abigeato y los robos, porque al haber una falta de dinero y falta de trabajo, la gente quiere vivir, quiere comer, y bueno… Eso es lo que está pasando. Antes dormíamos con las puertas abiertas. Villa Dolores es una ciudad que tiene 45 o 50 mil habitantes. Estamos rodeados de hermosos lugares, porque es una zona turística, tenemos ríos, tenemos diques, y todas estas cosas facilitan al turismo. Pero también facilita que venga gente a ocuparse de lo que no tendrían que ocuparse.
-¿Es robo hormiga, pequeños animales, o son estructuras más grandes que se llevan ya varias cabezas?
-Hay algunos que han robado bastantes cabezas, y en otros casos tractores o muchas cosas, las cubiertas que se dejan de los acoplados; las herramientas también. Todo eso perjudica al productor y al hombre que realmente trabaja.
-En general el gobierno de Córdoba es receptivo de las preocupaciones del agro. No te manda a dormir sin haberte atendido, como sucedía a veces con el gobierno nacional.
-Casualmente en nuestro caso lo tenemos al ministro de Agroindustria, que es el doctor Sergio Busso, que con nosotros siempre se ha portado muy bien. Por eso es que nosotros hemos formado este grupo y vamos a tener un diálogo con él. Hemos pedido una audiencia, y también vamos a solicitar una con el gobernador (Martín Llaryora). Nosotros estamos dispuestos a avanzar como bloque y hoy en día estamos haciendo gestiones para estar bajo el ámbito de la Sociedad Rural Argentina. Ya se han tirado las líneas, y también hemos quedado de presentarles la agenda que hemos hecho. Creemos que nos va a ir muy bien, porque los ánimos están todos puestos a favor, y creemos que en definitiva estamos haciendo algo que nos pide la gente y los pueblos de nuestra región, que es la mejor manera de representar finalmente a los productores.