El programa Prohuerta, que depende del INTA y el Ministerio de Desarrollo Social, destacó que unas 4.000 familias rurales de bajos recursos pudieron mejorar en los últimos meses sus posibilidades de acceso al agua potable gracias a un sistema de “cosecha de agua de lluvia” a través de cisternas de placas impulsado desde ese espacio estatal. Esas 4.000 familias están ubicadas en 9 provincias.
“En el Decenio de la Agricultura Familiar nos sumamos al desafío de asegurar el acceso al agua y mejorar el bienestar de las comunidades rurales de todo el país”, indicó el Prohuerta en un comunicado, en el que se destacó que un total de 550 proyectos especiales ProHuerta permitieron en estos años que más de 16 mil familias ejerzan este derecho.
Ver Paso a paso. Construcción de tecnologías apropiadas. Cisterna de placas
La cuarta parte de ese total, las mencionadas 4 mil familias, utilizaron la técnica de “cosecha de agua” de lluvia. Como ejemplo, el Prohuerta difundió un video en el que informa sobre un experiencia realizada en El Impenetrable, en el Chaco, donde “son casi 100 las familias que mejoraron su calidad de vida con Cisternas de Placas, una tecnología económica y efectiva”. Estas cisternas permiten colectar 16 mil litros de agua para distintos usos a partir de la captación de lluvia.
Según informó el INTA, más del 80% de las demandas de las comunidades rurales pasan por disponer de agua de calidad y en cantidad. Es el principal desafío para mejorar las condiciones de vida del sector más vulnerable a su escasez y que genera un gran volumen de alimentos para el mundo.
Mirá el video difundido desde el Prohuerta:
Las cisternas de placas difundidas desde este organismo permiten afrontar sequías o épocas donde no llueve habitualmente en diferentes regiones del país. Se trata de cisternas que “son económicas y de auto-construcción”, que además promueven la organización de las comunidades rurales.
Este sistema de acopio de agua de lluvia además funciona liberando tiempo de los pequeños productores y sus familias para otras tareas, ya que el acarreo de agua ocupa hasta 6 horas diarias en el medio rural.