Lara López Calvo, una economista que entiende sobre agro, explica las causas de esa rareza: “Es increíble el poco conocimiento que existe sobre el campo”

Lara López Calvo, quien trabaja en América TV junto a Antonio Laje, es una auténtica rareza. Esta economista de 24 años de edad, a diferencia de la mayor parte de sus colegas, no solamente comprende cuestiones relativas al sector agropecuario, sino que además trabaja para promover la presencia de contenidos relativos a esa materia.

De hecho, todas las mañanas, a eso de las 7:00 horas, se la puede ver a Lara explicando noticias agropecuarias en una sección del noticiero de América denominado BDA Junto al Campo. En Bichos de Campo no nos quedamos con la duda y decidimos consultar a la periodista para averiguar el origen de tales inquietudes.

“Tanto mi padre como mi madre nacieron en la mitad del campo; mi papá vivió de hecho en el campo hasta los 18 años de edad y mi mamá hasta los 10 años”, explica Lara.

“Ambos desarrollaron sus carreras en la ciudad de Buenos Aires, pero desde chica íbamos casi todos los fines de semana al campo de mis abuelos, quienes recién dos años atrás se mudaron a la ciudad de 9 de Julio”, agrega.

Tu infancia y adolescencia transcurrió entonces ligada al campo.

Así es. Me crié con vacas, caballos y gallinas, subida a un tractor o una cosechadora o sacando cardos con un machete. Eso hizo que desde chica pueda vivir cómo es la vida en el campo y así empecé, años después, mi carrera como periodista en El Cronista como encargada de cuestiones agropecuarias.

¿Qué te impulsó a estudiar economía?

Desde la secundaria siempre me “picaba el bichito” por la materia de economía y específicamente por cuestiones relativas al agro. En la ciudad de Buenos Aires, la capital de la Argentina, es increíble el poco conocimiento que existe sobre el agro y eso incluso lo pude percibir hasta en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA), lo que no es comprensible, teniendo en cuenta que el 70% de las divisas que ingresan al país en concepto de exportaciones de bienes provienen del agro. Durante los cinco años de la carrera molesté a muchos profesores sobre el tema, pero nunca encontré mucha receptividad, incluso en geografía económica, que debería ser la materia que tendría que tener más conocimientos al respecto. Está mal armada la carrera en cuestiones de agro.

¿Y materias extracurriculares tampoco?

Nada. También debo decir, para ponerlo en contexto, que la carrera de economía tampoco tiene casi nada de finanzas; un economista de la UBA se puede recibir tranquilamente sin saber qué es el rendimiento de una acción; hay mucho de macroeconomía, microeconomía e historia, pero no de finanzas, y eso en una Argentina donde la tasa de interés de referencia sube cada quince días. Lo mismo sucede con el sector agropecuario, donde ni siquiera hay una alternativa para elegir como materia optativa y en las materias en las que se podría tocar el tema de manera tangencial hay mucho desconocimiento por parte de quiénes las dictan. Sigo en la facultad, como ayudante de cátedra de Macroeconomía I, y espero que algún día los planes de estudio puedan ser más abarcativos.

O sea no encontraste ninguna materia en la cual se explique la importancia de la matriz agroindustrial en la economía argentina.

Exacto. Ninguna materia en toda la carrera de economía de la UBA donde se ponga el foco ahí.

Eso explica muchas cosas en el diseño de las políticas públicas.

Totalmente. Muchas veces están diseñadas por economistas que tienen buena fe pero desconocen al sector y lo que sucede es que, aunque estén bien instrumentadas, la principal falencia es que no tienen en cuenta a los pequeños y medianos productores, que es dónde deberían estar focalizadas tales políticas. Cuando el pequeño productor escucha anuncios supuestamente destinados al campo, lo que primero que suele decir es eso a mí no me va a llegar y termina por lo general siendo así.

¿Tu abuelo es un pequeño productor?

Así es: tiene un pequeño campo en las inmediaciones del pueblo de Carlos María Naón (partido bonaerense de 9 de Julio). Antes tenía un rodeo de hacienda, pero en el segundo gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, que fue muy duro para los ganaderos, las políticas destruyeron su ambición por dedicarse a la ganadería y se deshizo de los animales. Actualmente sólo se dedica a la actividad agrícola. Hoy tiene 91 años mi abuelo y sigue al frente de la empresa, luego de comenzar como peón y lograr, con mucho esfuerzo, comprar sus primeras 24 hectáreas en la esquina del campo en el cual trabajaba.

Tu papá es Daniel López, locutor de Radio Continental. ¿Se podría decir que sos una suerte de síntesis entre tu abuelo y tu padre?

Sí, es una linda definición. Creo que gran parte de lo que soy viene de ahí. Mi lugar en el mundo está en Carlos María Naón, en la casa de mis abuelos, en el campo, pero trabajo en un canal de noticias de la ciudad de Buenos Aires; complementar esos mundos tan contrastantes me encanta. Los ritmos de ambos ámbitos son muy distintos, pero creo que uno balancea al otro.

La relación con tu abuelo resultó clave probablemente en el desarrollo de tu vocación.

Siempre estuve lejos de mis abuelos; los podía ver una vez cada quince días o una vez por mes y eso fue, de alguna manera, una oportunidad porque sabía que cuando estaba con ellos tenía que aprovecharlos y he tenido grandes conversaciones con los dos sobre múltiples temas. Mi abuelo, por ejemplo, siempre me insistía en decirme “te prohíbo vivir solamente de un salario, intentá siempre tener algo propio, más allá de los trabajos que puedas tener”. Y es un gran consejo (Lara tiene un canal en Instagram sobre educación financiera con casi 180.000 seguidores)

Trabajaste en El Cronista y pasaste a la tele. Me imagino que te encontrarse con el desafío de tener que simplificar muchos conceptos complejos para poder comunicarlos.

Es muy difícil hablar claro para lograr que muchas personas del ámbito urbano se interesen por cuestiones agropecuarias; eso fue un desafío. Y también lo fue interesar a quiénes tienen poder de decisión en los medios de comunicación, porque no se le suele dar mucho lugar a las noticias agropecuarias. Por supuesto, también es indispensable “bajar a tierra” lo que se comunica para que todos puedan entender de qué estamos hablando. La sección BDA Junto a Campo, que hago junto a Antonio Laje, creo que no se hace en ningún noticiera argentino. Antonio me impulsó y apoyó para poder lograr eso; él también considera que el tema agro debería tener un espacio mucho más relevante en la televisión.

¿Seguís yendo al campo?

Sí, cada unos dos meses. Hace dos años mis abuelos, luego de vivir siempre en el campo, se mudaron a una casa en la ciudad de 9 de Julio por cuestiones de comodidad y salud. Mi abuela protesta igual todos los días por esa decisión.