Las terminales portuarias y plantas de almacenaje de granos de Santa Fe deberán cumplir progresivamente un protocolo de seguridad para evitar nuevos accidentes mortales por las “explosiones de polvo” que suelen generarse en esas instalaciones agroindustriales. Los plazos de adaptación serán de uno a dos años.
El gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, presentó este martes en Rosario el primer protocolo que existe en el país para la Prevención y Mitigación de Explosiones de Polvo en plantas de acopio, acondicionamiento, procesamiento y terminales portuarias que manipulen cereales, oleaginosas y subproductos sólidos derivados.
Uno de los más graves riesgos que ocurren dentro de las plantas de acopio y almacenamiento de granos son las explosiones causadas por el polvo. Se producen cuando materiales sólidos inflamables se mezclan intensamente con el aire y está presente algún punto caliente. De la interacción de esos tres factores, surge una explosión inicial que provoca un incendio pequeño o explosión, que hace que el polvo depositado en el resto de la instalación sea arrojado al aire, se mezcle con el aire y se desarrolle una nueva explosión.
Hubo varios obreros muertes en los últimos años en accidentes de este tipo, que ahora se buscan evitar con este protocolo. En Trabajo de Santa Fe recordaron los antecedentes de TOEPFER (Pto. Gral San Martín Octubre 2001), ACA (San Lorenzo Abril 2002) y COFCO (Pto. Gral San Martín, en Diciembre 2018), entre varios otros.
“La iniciativa ratifica la voluntad del gobierno santafesino de impulsar políticas relacionadas con la prevención de la salud y la seguridad en el trabajo”, indicó un comunicado oficial, que dio cuenta que el protocolo se logró tras una serie de reuniones entre las cámaras y empresas de las terminales portuarias y los sindicatos respectivos: aceiteros y recibidos res de Granos.
El protocolo surgió del trabajo mancomunado de más de un año entre URGARA, con el trabajo técnico de Osvaldo Guillen, el Sindicato de Aceiteros, la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA), la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), Agricultores Federados Argentinos (AFA), Sociedad Gremial de Acopiadores de Granos y la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de San Lorenzo, y Ministerio de Trabajo.
La Unión de Recibidores de Granos y Anexos de la República Argentina (URGARA) celebró este trabajo conjunto, aunque sus dirigentes aclararon que las autoridades provinciales deberán hjacer cumplir los plazos para su aplicación en las diferentes terminales exportadoras. Desde el llamado Gran Rosario salen cerca del 70% de los embarques totales de granos y subproductos del país.
Según los gremialistas de URGARA, en tanto, se trata de “una herramienta que permitirá eliminar y o reducir las posibilidades de explosiones de polvo en los lugares de trabajo, en la medida que todos los actores que participaron crean y cumplan el compromiso que se asumió cuando esto comenzó”, según señaló Fabian Cancio, referente de Seguridad e Higiene de ese sindicato.
Desde hace 4 años URGARA creó un departamento específico debido, explicó, a “la difícil realidad que viven los trabajadores por desidia, falta de información y conocimientos mínimos sobre la legislación vigente y sus derechos a proteger su salud y su vida”.
“A partir de hoy empieza una segunda etapa, la de implementación y aplicación de este protocolo, teniendo en cuenta que empresas, gremios y Estado deben cumplir con este compromiso asumido, respetando y cumpliendo el rol que a cada uno le compete”, concluyeron desde URGARA.
Los sólidos son combustibles, no inflamables.