En la nota anterior explicamos el significado de algunas palabras de la Chacarera del Chilalo, con el afán de que en el resto del país conozcamos y entendamos mejor el paisaje y la cultura de Santiago del Estero. En esta ocasión hemos elegido a la zamba Jujuy Mujer, porque también se compone de muchas palabras que al sur de la Argentina suelen desconocerse.
Contactamos a su autor, el poeta jujeño Alejandro Carrizo, para que nos explicara cada una de ellas, pero además nos proporcionó una yapa: el relato de cómo se gestó esa canción que hoy ha trascendido las fronteras por haber tocado los ‘hilos’ del alma de nuestro pueblo (al final de todo, les compartimos un extracto).
Jujuy-mujer (Zamba en letra del jujeño, Alejandro “Coyuyo” Carrizo, y música del tucumano, Néstor “Poli” Soria).
Volveré Jujuy una tarde de éstas
vidaleando olvidos, bagualeando penas.
Subiré por Yala, monteando en silencio
pa’ volverme runa golpeando los cueros.
Fiera la distancia…
Barbarita Cruz, sola en Purmamarca.
Tiempos de cosecha me están esperando,
machetes calientes, gritos de chaguancos.
Se oye en el Talar, coquiar la esperanza,
sube un viento indio por las lachiguanas.
Ay! Pin-pín de sueño…
vientre de la tierra llevame p’ adentro.
Estribillo
Volver, Jujuy, engualichao,
a tus montañas de pan mineral
y en la luna dejar todo mi corazón
desvelao…
Ay, volver volviendo,
ay, Jujuy-mujer, que me estoy muriendo.
Si por Casabindo anda un toro suelto,
mirale en las guampas su sueño minero.
Si por Calilegua llora una mataca,
dejame que bese su sombra gualamba.
Silban las tembetás…
devolveme al fuego de mi tierra agraria.
Rengo Mallagray aguantá la macha,
alentame el vino, descorchame el alma.
Parchemos con duendes todas las guitarras,
subamos al Inca por la tilcareada.
Truena el erke macho…
un rumor de estrellas sube por Lozano.
Se repite el estribillo
Tembeta: bodoque bautismal (cuando el niño ya puede ser padre o Quereimba, guerrero) que se injerta debajo del labio, porque son los “cuidadores de las palabras”, los “hombres de la neblina de las palabras inspiradas”, los dueños de las “palabras alma” ava-guaraní.
Yala, Lozano, Calilegua: localidades jujeñas.
Mataca: designación criolla de la etnia wichí.
Casabindo: localidad de la puna jujeña, donde se celebra el “toreo de la vincha”, toreo sin herir ni matar al animal, que se realiza allí cada 15 de agosto.
Gualamba: chaco gualamba, lugar de cacería. Referido a la zona del Gran Chaco desde el Este de Tucumán, Santiago del Estero, Norte de Santa Fe, Chaco, Formosa, Oeste de Paraguay y Este de Bolivia, aproximadamente.
Rengo Mallagray: Carlos Mallagray, poeta jujeño.
Runa: “hombre” en quechua…
“Golpeando los cueros”: se refiere al golpe para hacer sonar las cajas bagualeras.
Barbarita Cruz: ollera y pintora de Purmamarca.
Chaguancos: designación criolla de personas Ava-Guaraní.
El Talar: localidad de las yungas jujeñas.
Lachiguanas: abejita que produce una miel muy dulce.
Pin-pín: designación criolla de la danza del Arete Guasu (ava-guaraní): “El tiempo verdadero”… ya que están yendo (trashumantes) hacia “la tierra sin mal”…
Cuenta Carrizo que corría el año 1984 cuando él se había ido a estudiar Letras a Tucumán. Una noche, junto al poeta y músico tucumano Néstor “Poli” Soria, había ido a presenciar el espectáculo del guitarrista, Juan Falú. Éste, recién regresado de su exilio, se había presentado junto a los gloriosos Hermanos Nuñez, Pepe y Gerardo. A la salida, Carrizo invitó a Soria a su casa con la intención de escribir y componer juntos algo que prolongara esa misma emoción que los desbordaba. Carrizo le dijo angustiado, a Soria, que extrañaba mucho a su provincia. Y éste le dijo que pues escribiera sobre ese sentimiento. Y la letra le salió de un tirón, pero se trancó en el estribillo. “Néstor, guitarra en mano, comenzó a ‘travesear’ la melodía. Y a mí gustó… La grabamos en un grabadorcito pobrísimo… Y ahí durmió un par de años”, relata.
Hasta que la grabó la cantora Ángela Irene. “Así que corrimos a SADAIC a registrarla… Y entonces empezamos a soñar… Pero el tema ‘durmió’ 10 años. En 1994 ella la cantó en Cosquín, y en 1995 salió su disco. ¡Qué emoción! Primera vez que veía un tema mío grabado en serio, ¡en el sello Sony!… Después conocí a Ángela y nos hicimos amigos para toda la vida…”
“Después lo grabó Tomás Lipán (que lo recontra popularizó), y después Los Changos… y después, de todo el país… Recién comencé a cobrar los derechos de autor a los 20 años, en 2004. Luego, Los Tekis y un estadio entero la cantaba… Después me hice amigo de Barbarita Cruz, y ella me invitaba a su casa en Purmamarca… Y mi viejo amigo, el Rengo Mallagray, se enojó. Le daba bronca que lo reconocieran por esa zamba y no por sus poemas”.
“Después vinieron los mitos: empezó a correr la voz de que no era mía, que la había plagiado, o robado… Después vino Marchena, el rector de la Universidad de Sevilla, y me dijo que la cantaba toda Sevilla, y que él les decía que conocía al ‘Coyuyo’, al autor, es decir, a mí.”
“La mujer de Néstor Soria decía que me quedaba mal que él me dijera ‘Coya’. Entonces él me dijo ‘Ahora sos Coyuyo’. Después me dijeron que la escucharon en Chile, Paraguay y Bolivia…Algún rumor me llegó de que se decía que la zamba era del ‘Huevo’ Helguera…”
“Otro evento fue cuando una noche yo caminaba lentamente por la calle Lavalle y escuché desde detrás de mí que alguien la silbaba y se aproximaba… Sonreí: ‘será un amigo’, me dije. Pero no. El hombre pasó a mi lado, me miró indiferente y siguió silbando con una gran pasión. Me quedé esperando la sorpresa, el chiste. Y nada. Él la silbaba para él, yo era sólo un transeúnte. Entonces me dije: ‘Esa zamba que hicimos una noche de 1984 con Poli, ya no es mía o de él; es de todo el pueblo, de todo el pueblo jujeño…”
“Me pasaron cosas… Llegué a ser Director de Cultura de la Municipalidad de Jujuy por la zamba… Una vez, en Buenos Aires, me fui a hacerme unos anteojos de aumento. Cuando le conté al óptico que era de Jujuy, suspiró y me confesó que él y toda su familia eran fanáticos de Tomás Lipán; y cuando le dije quién era yo, no me quiso cobrar los anteojos… Un poco loco todo, ¿no?…
“Es un ‘fenómeno’ del cual, creo, todavía no estoy muy consciente, quiero decir, todavía me sigo sorprendiendo de lo que puede hacer una pequeña canción”. Alejandro “Coyuyo” Carrizo, Jujuy, 30-01-2018.
Agradecemos al poeta, ensayista, editor y dramaturgo, Alejandro Carrizo, por habernos brindado casi toda la información que hemos vertido en esta nota. El autor eligió dedicarnos su canción interpretada por el dúo Los Changos, integrado por el jujeño Luis Ángel Paredes (qpd) y el chaqueño Franco Barrionuevo.
https://www.youtube.com/watch?v=cW3YfX2okIc