Finalmente, luego de una intensa negociación que no estuvo exenta de conflictos, los representantes de los trabajadores rurales llegaron a un acuerdo paritario con los dirigentes de las entidades agropecuarias.
Este miércoles se firmó en el marco de la Comisión Nacional de Trabajo Agrario (CNTA) un ajuste por inflación del 55% para el período que se extiende de agosto a diciembre de 2022.
El ajuste por inflación, según lo acordado, llegará a los bolsillos de los trabajadores rurales en tres tramos: un 30% en agosto, un 12,5% en octubre y el restante 12,5% en diciembre.
El ajuste del 55% para un período de cinco meses –agosto a diciembre de este año– equivale a una actualización anual nada menos que del 132% (cifra que puede estar en línea con la inflación minorista del presente año 2022).
Vale recordar que semanas atrás se procedió a actualizar el salario mínimo de los trabajadores rurales con el propósito de que el ajuste por inflación por implementar en el período 2022/23 se realice sobre una base superior.
Las partes – la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (Uatre) y representantes de la Comisión de Enlace Agropecuaria y CAME– se comprometieron a volver a la mesa de negociación en enero de 2023 para evaluar una nueva recomposición de haberes en el marco de actual aceleración inflacionaria.