Luego de más de siete horas de negociaciones, los representantes de la industria aceitera y de biocombustibles llegó a un acuerdo con los dirigentes de la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso (FTCIODyARA) y del Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros (SOEA).
Eso implica que en lo que queda de la presente semana no debería haber por parte de los gremios aceiteros paros y bloqueos que afecten la normal comercialización de granos.
“En ambas partes primó la cordura, lo que permitió alcanzar un acuerdo mutuamente aceptable para todos”, indicó esta noche Ciara-CEC por medio de un comunicado.
El núcleo del conflicto, que derivó en paros generales el pasado mes de agosto, es que la mayor parte de los salarios de los trabajadores aceiteros quedaron comprendidos en el aumento del impuesto a las Ganancias aprobado este año por el Congreso.
Actualmente, más del 60% de los aceiteros tienen salarios brutos que se encuentran por encima de los 2,80 millones de pesos mensuales y esa cifra, considerando a un empleado casado con dos hijos a cargo, debe abonar 56.000 pesos de impuesto a las Ganancias, mientras que si es soltero sin hijos esa cifra trepa a 152.000 pesos.
En términos porcentuales, el acuerdo cerrado esta noche implica un ajuste del 26% sobre el salario básico, el cual, sumado al 76,2% de los acuerdos firmados en enero y abril pasado, comprende un aumento del 122% por el periodo de 2024. La nueva paritaria lleva el salario básico inicial (peón) a 1.562.655 pesos mensuales.
Las partes consensuaron volver a encontrarse en el mes de diciembre de 2024 para negociar la actualización por inflación correspondiente.