Se suman anuncios que tienen la misma métrica: la banca pública está diseñando nuevas líneas de créditos o fondos de inversión, en términos ventajosos en medio de esta crisis macroeconómica, para diferentes actividades productivas. La idea es reactivar la economía, a ver si funca.
El Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE), por su lado, puso en marcha nuevos créditos para inversiones y exportaciones de Pymes. La línea se llama “Inversión Productiva” y tendrá un monto total de 2.000 millones de pesos, e incluye préstamos de hasta siete años de plazo, con dos años de gracia. En este esquema, el Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (FONDEP) subsidiará 12 puntos de tasa durante los tres primeros años, tomando como referencia la tasa Badlar Privada + 6 puntos. Pero se estableció además que en los primeros 24 meses la tasa final para las empresas no podrá superar el 24%.
Las empresas podrán pedir hasta 75 millones de pesos para desarrollar sus proyectos.
Dentro de ese programa, habrá un cupo del 15% del monto total para el sector vitivinícola y de un 20% para empresas lideradas por mujeres.
El Ministerio de Desarrollo Productivo asigna un cupo específico de $300 millones en créditos subsidiados para la vitivinicultura
Por primera vez se asignó un cupo específico para financiar inversiones que beneficia desde la producción de uvas para vinificar, vender en freso o pasas, a la elaboración de vinos, espumantes y la fabricación de jugo concentrado o mosto.
Este dato fue destacado por la Coviar, la Corporación Vitivinícola. “Por primera vez, dentro del monto total se asignó un cupo exclusivo del 15% del total (300 millones de pesos) para financiar inversiones en el sector vitivinícola, desde la producción de uvas para vinificar, vender en freso o pasas, a la elaboración de vinos, espumantes y la fabricación de jugo concentrado o mosto”, se explicó desde ese organismo mixto.
El lanzamiento de estos créditos estuvo encabezado por el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa; el secretario de la Pequeña y Mediana Empresa y de los Emprendedores, Guillermo Merediz; y el titular del BICE, José Ignacio de Mendiguren.
La asignación de un cupo específico de financiamiento para la vitivinicultura “es parte del plan del Gobierno Nacional de impulso a las exportaciones vitivinícolas anunciado para llegar a los 1.000 millones de dólares en vinos fraccionados. Se sumó este anuncio al aumento de más del 100% en los reintegros a las exportaciones recientemente otorgado.
También se presentó la línea BICE Internacionalización, con un cupo total de 35 millones de dólares para créditos de prefinanciación de exportaciones con un plazo de hasta 6 meses. Los primeros exportadores (o que no realizaron exportaciones en los últimos 3 años) podrán solicitar un monto de hasta 200 mil dólares y contará con tasa del 4%. En el caso de los exportadores frecuentes, podrán pedir hasta 300.000 dólares, con una tasa del 4,5%.
Esta línea contará además con el respaldo de garantías de FOGAR, con un desembolso en una primera etapa de $250 millones, que permitirá acompañar en un 100% créditos por un total de $1.000 millones en los casos de primeros exportadores o exportadores no frecuentes. Las empresas solicitantes también podrán acceder a la línea a través del aval de Sociedades de Garantías Recíprocas o de Fondos de Garantías Provinciales.
“Vale la pena recordar que hace un año la tasa de interés a la que debían financiarse las empresas era del 80, 90 o 100% anual. Obviamente ninguna empresa podía sobrevivir con semejante tasa de interés y cuando cae el financiamiento cae la producción, la inversión, se reduce el empleo y la economía entra en un período recesivo. Eso es lo que queremos revertir”, dijo el ministro Kulfas.
Desde al Banco Nación, por otro lado, se anunció el lanzamiento de “Pellegrini Agro”. Se trata de un producto diseñado por Pellegrini SA, que lanzó un Fondo Común de Inversión para invertir en activos financieros que acompaña la evolución del precio de la soja, con una cartera en instrumentos de cobertura (futuros y opciones) de soja y dólar.
En este caso, más que prestarle plata en pesos a quienes producen, el Estado pretende generar herramientas de inversión para quienes no saben qué hacer con sus pesos y quiere evitar que los vuelquen hacia el mercado del dólar libre, recalentando las cotizaciones de esa divisa.
Por eso, la propuesta del BNA “le brinda al inversor una herramienta para invertir en una cartera que copia del precio de la soja en su valuación en dólares link y al productor, un instrumento para obtener cobertura ante la evolución del precio FAS teórico en pesos, esto es, el precio de la soja valuado en pesos en el Puerto de Rosario. Además, permite gestionar la liquidez de su negocio, disminuir el riesgo de pérdida de grano almacenado en silobolsa o costos de almacenamiento hasta su venta y optimizar el costo impositivo”, se explicó.
Daniel Otero, presidente de Pellegrini Fondos Comunes de Inversión, explicó que “este instrumento proporciona al inversor dispuesto a asumir un riesgo alto, una alternativa más en términos de diversificación de cartera incursionando en inversiones agrarias, sin necesidad de ser un experto en tema”.
Destacó como otro atractivo de este nuevo fondo la provisión de una cobertura eficiente sobre la cosecha porque “invertimos en futuros de soja, de dólar y en diversos activos financieros del sector”.
La herramienta permite suscribirse con una inversión mínima de 1.000 pesos y rescate en 48 horas.