Este año productores integrantes del grupo CREA Villegas visitaron la planta de bioetanol Bio4, ubicada en la zona cordobesa de Río Cuarto, y al regresar a su terruño comenzaron a darse “manija” sobre lo bueno que sería tener una industria así en el oeste bonaerense.
Pero, lejos de quedarse sólo con el sueño, comenzaron a investigar la factibilidad técnica de un proyecto de tales características y se encontraron con que existe disponibilidad de gas natural, energía eléctrica y agua para montar una planta de bioetanol con una capacidad instalada de 90.000 metros cúbicos por año.
Comenzaron a entusiasmar a otros empresarios agropecuarios de la zona e incluso a Manuel Ron, presidente de Bio4, quien aceptó sumarse al proyecto (vale recordar que Bio4 fue fundada por productores del sur cordobés).
Entre todos los interesados lograron sumar aportes por 25 millones de dólares para un proyecto que requiere un inversión inicial de 100 millones. El monto restante debe provenir de créditos bancarios. También se está evaluando crear un fideicomiso para inversores minoristas, de manera tal que los vecinos de Gral. Villegas puedan participar de la propuesta y obtener un retorno.
“El proyecto nos entusiasma mucho porque generaría un gran desarrollo a nivel regional al tratarse de la primera fábrica de bioetanol de la provincia de Buenos Aires. Gral. Villegas no tiene grandes industrias, pero con esta fábrica eso cambiaria”, explicó a Bichos de Campo Juan Pablo Russi, uno de los impulsores de la iniciativa.
La planta de bioetanol –que ya tiene nombre: Biovi– se instalaría en el establecimiento El Clarinete de la familia Courreges y consumiría 668 toneladas de maíz por día (22 camiones) para generar un volumen diario de 257 metros cúbicos de bioetanol y 501 de burlanda.
“La producción diaria de burlanda de maíz alcanza para alimentar a 80.000 cabezas de ganado y yo en la zona, como consultor en nutrición animal, tengo clientes que suman 180.000 cabezas”, graficó Russi.
Para los feedlots y tambos la burlanda de maíz es un producto más eficiente, tanto en términos productivos como económicos, que el grano entero del cereal. La planta de bioetanol, en caso de instalarse en Gral. Villegas, permitiría valorizar así unas 235.000 toneladas anuales de maíz con el consiguiente ahorro de fletes hacia los puertos.
El proyecto permitiría generar 150 empleos directos y otros 300 directos, razón por la cual el intendente de Gral. Villegas, Gilberto Alegre, se lo presentó al ministro de Desarrollo Agrario de Buenos Aires, Javier Rodríguez, para solicitar que la provincia no aplique el impuesto de Ingresos Brutos al bioetanol, dado que con ese impuesto la inversión resulta inviable.
“El proyecto depende del aumento del corte obligatorio de bioetanol con nafta, que actualmente se encuentra en el 12% y debería incrementarse al 15% para sumar nuevas empresas a la actividad”, explicó Russi.
El proyecto de biocombustibles elaborado por la “Liga Bioenergética” que se encuentra en el Congreso contempla un aumento del corte obligatorio del 14% para octubre de 2025 y del 15% para el mismo mes de 2026. Sin embargo, el equipo económico liderado por el ministro Luis Caputo no ve con buenos ojos esa iniciativa y está elaborando un proyecto propio de promoción de biocombustibles, el cual aún no fue difundido públicamente.
“Confiamos es que la política estará a la altura de las circunstancias y generar el marco adecuado para que el proyecto de Biovi pueda prosperar”, se esperanzó Russi.
“Vine a vivir a la ciudad de Villegas en 1994 y hoy tiene tres restaurantes, la misma cantidad que tres décadas atrás. No es factible que hayamos progresado tan poco en tanto tiempo con el enorme potencial presente en la región”, resumió el empresario, quien además de productor es director de la firma de nutrición animal Nutrevill.