Firmado el 27 de marzo, el decreto 285/2024 de Javier Milei dispuso la intervención del Instituto Nacional de la Agricultura Familiar, Campesina e Indígena (INAFCSI), donde se despidieron a unas 900 personas, y designó allí como interventora a la abogada salteña Inés Liendo. Luego, en julio, una resolución de Luis Caputo prorrogó por 90 días esa intervención, que continúa en la actualidad dependiendo de Liendo.
Unos días después, el 23 de julio, en el marco de la Exposición Rural de Palermo, el poderoso secretario de Coordinación de la Producción, Juan Pazo, anunció la creación dentro de Agricultura la creación de la Subsecretaría de Economías Regionales, y que ese área estaría a cargo de la mismísima doctora Inés Liendo, quien ya se presenta con ese cargo en las redes sociales aunque todavía no haya salido su designación formal en el Boletín Oficial, pues está pendiente la reorganización del organigrama de la Secretaría.
Ahora, el mismo nombre de Inés Liendo aparece en el listado de cuatro “asesores” que el Poder Ejecutivo designará dentro del INTA, tal cual se decidió en la reunión del Consejo Directivo de la institución que discutió algunas imposiciones de ajuste promovidas allí por el mismo Pazo. Este funcionario, en realidad, pretendía designar directamente a ocho de los directores del INTA, pero el consejo se opuso porque esos son cargos que se obtienen por concurso, nunca “a dedo”. Entonces la fórmula encontrada es formar este consejo asesor de cuatro integrantes.
¿Cuántos cargos tiene Inés Liendo dentro del Estado? ¿Cobra diferentes sueldos por todos ellos? Son preguntas pertinentes luego de que oficialmente se confirmó que esos cuatro asesores que velarán por el proceso de reorganización o ajuste del INTA serán Gonzalo Abaurrea, Matías Nardello, Luis Negruchi y la mismísima Inés Liendo.
De los antecedentes de esta funcionaria no hay mucho para decir, porque prácticamente no tenía recorrido en la función pública. Según su propio muro en Linkedin, Liendo se recibió de abogada especializada en derecho administrativo en la Universidad de Buenos Aires en 2011, y realizó un master hasta 2015. A partir de ese año, fue ayudante de cátedra en esa facultad y también docente de la San Andrés, y se desempeñó como asesora de la Secretaría de Educación del gobierno porteño. Más tarde, y hasta enero de 2020, fue coordinadora de la Gerencia de Administración en el PAMI y luego de eso no tuvo ninguna actividad visible, salvo la conducción de un programa de televisión en su provincia, Salta, llamado “La hora de Inés”.
Hoy, los defensores de la vida, la familia, la libertad y el capitalismo estamos doblemente felices!! Por la victoria de Trump!! Y por la derrota de Kamala Harris, probablemente la peor candidata que presentaron los demócratas en toda la historia. Un desastre en todo sentido!!
— Inés Liendo (@ineliendo) November 6, 2024
Pero su meteórico ascenso en el gobierno libertario claramente se debe a su alineación política, ya que en Salta primero era militante del PRO de Mauricio Macri, pero ni bien se definió el balotaje se convirtió en una fervorosa defensora de Milei.
El sitio Tierra Viva investigó de dónde proviene la vocación política de Inés: “El apellido Liendo no es nuevo en la política argentina. La interventora es nieta del militar Horacio Tomás Liendo, primer ministro de Trabajo de Jorge Rafael Videla y ministro del Interior del siguiente presidente de facto, Roberto Viola”. En tanto el padre de Inés, Marcelo Liendo, también hizo carrera militar. Llegó a ser coronel y comandó el Regimiento 5º de Caballería en Salta. Además fue subjefe de la V Brigada de Infantería de Montaña en esa provincia. Su tío, además, es Horacio Liendo, reconocido funcionario desregulador del gobierno menemista.
Los otros hombres designados por Pazo en este intento de “intervención en el INTA” tampoco tienen demasiados antecedentes en la función pública.
El veterinario Matías Nardello era director de márketing del laboratorio Bioegénesis Bagó hasta que el gobierno de Macri lo designó director de sanidad animal del Senasa entre 2018 y 2019. Desde allí promovió con mucha fuerza el programa de trazabilidad individual de los bovinos que finalmente se reglamentó unos pocos días antes del cambio de gobierno de diciembre de 2019 y quedó “congelado” hasta ahora. Las caravanas electrónicas son ahora el gran caballito de batalla de Pazo en su gestión “agropecuaria”, y se acaba de llamar a licitación para la adquisición con un crédito internacional de 24 millones de esos dispositivos, para poder llevarla a cabo.
Curiosamente el nombre de “Gonzalo Abaurrea” difundido por las autoridades del INTA no existe en el padrón argentino y debe haber algún error. Ya develaremos el misterio. Seguramente se trate del apuro en copiar y difundir un listado de nombres enviado por Pazo, lo que confirma la intromisión directa de Economía en la gestión del presidente del INTA, Nicolás Bronzovich.
El cuarto asesor es Luis Negruchi (foto), quien como antecedentes tiene el haber trabajado en la organización junto a Aapresid del llamado “Tecnódromo” de la Exopagro en San Nicolás, y sería socio de esa entidad tecnológica de la cual provienen tanto Bronzovich como la vice del INTA, María Beatriz Pilu Giraudo. Al menos, la representó en la Conabia en 2018. En la AFIP Negruchi aparece inscripto como proveedor de servicios agrícolas y en “servicios inmobiliaros” en la zona de Venado Tuerto, Santa Fe.
Me parece que Juan Pazo precisa gente de su confianza cerca. Ines viene del pro de salta. Una mujer honesta, muy capaz.
Que pretenden que cerca del señor Pazo esten los kukas y la campora, los judas
Ines es una persona honesta , idonea, en salta la conocemos bien y la queremos.
Hola, me parece que es más de lo mismo, intentos de acomodar gente de dudosa capacidad e idoneidad, siempre pensando en el “amiguismo “, si es necesario un “saneamiento ” dentro de la Institución, una reorganización, cosa en la que estoy de acuerdo, que sean profesionales capaces e idóneos quienes lo hagan independientemente de la bandería política a la que pertenezcan. Es increíble pero los Argentinos tropezamos siempre con la misma piedra, no somos capaces de resolver los más mínimos problemas. Me pregunto, será que estamos destinados a vivir en éstas condiciones???
Por lo que dice el artículo, las 4 personas designadas para asesorar en la reorganización del INTA tienen su propia actividad privada lo que los hace, al menos, ser sospechosos de no intentar “acarrear agua a sus propios molinos” cosa a la que estamos muy acostumbrados en éste bendito país. Todo es muy lamentable para los que estamos ” de afuera” y aportamos religiosamente con nuestros impuestos y seguimos viendo caer nuestros aportes en “saco roto”.
Es de suma necesidad revisar las 6400 personas y analizar si están cumpliendo con las expectativas técnicas del organismo, aportan o si no darlos de baja. De esta forma un mayor % de presupuesto puede destinarse a investigacion y desarrollo.
Sin embargo, me resultó inquietante los comentarios del vocero cuan dijo que el INTA no debía tratar temas de agricultura familiar, siendo que en áreas de periurbanos y cinturones verdes de cientos de municipios de Argentina, los productores son de escala reducida y el aporte de mano de obra es en su mayoría familiar. Veremos qué pasa en febrero y durante estos 6 meses que el equipo formado analice los recursos humanos. Tengo fe que se darán buenos aportes para tener un mejor INTA.