Comenzaron las negociaciones para definir el precio del kilo de tabaco, que se realizan de forma anual entre los productores y las empresas compradoras (usualmente con mediación de los gobiernos provinciales), pero no se llegó a un acuerdo.
En Jujuy y Salta, las principales provincias productoras de la variedad Virginia en el país y las que reúnen a los productores de mayor tamaño, se reclama un 70% de aumento respecto de los valores definidos en 2024, para el caso tabaco B1F de mayor calidad. Eso supone pasar de unos 2.800 pesos por kilo a 4.800.
En Misiones, la mayor productora del NEA para la variedad Burley, el pedido es por un 80% respecto de la campaña anterior. En 2024 la cotización rondó los 2.000 pesos, que luego fueron elevados a 2.800 con un plus de un bono por otros 300. Lo que se pide ahora un precio de 3.600 por kilo.
Mientras que en el NOA la última reunión realizada a finales de enero no llegó a una definición, al punto tal de que se espera otra para mediados de febrero, en el NEA la Asociación de Campesinos Tabacaleros Independientes de Misiones (ACTIM) indicó que solo se realizó un contacto telefónico. Allí se acordó seguir adelante con el acopio mientras las empresas cumplan con los acuerdos preexistentes, aunque no descartaron avanzar con bloqueos.
“¿Por qué pedimos aumentos? Porque entendemos que corresponde y es justo. Esta es una actividad de plena ocupación de mano de obra artesanal, y sobre todo con un fuerte circuito y generación económica en todas las regiones donde hacemos tabaco. Estamos en un sistema de comercialización liberal. Nosotros queremos hacer tabaco pero tenemos altos costos, entonces el mercado te dice bueno, no hagas, hacé otra cosa. Eso para nosotros no es tan así”, dijo a Bichos de Campo Pedro Pascuttini, presidente de la Cámara del Tabaco de Jujuy.
“Como productores debemos discutir el valor del tabaco, que es un bien exportable. El 95% de la producción de Jujuy y el 85% del país se exporta. Lo que estamos pidiendo ahora es una equitativa transferencia al sector productivo de la parte de las mejoras y beneficios que tuvieron los compradores provenientes de la quita de la retención del 12%, que significaron 77 centavos de dólares de beneficios para ellos”, señaló a continuación.
Para el jujeño, la quita de los derechos a la exportación para esa economía regional solo benefició a los exportadores, mientras que los productores no percibieron cambios en el valor de la materia prima, lo que les dificulta cubrir costos.
En particular para el NOA, Pascuttini se refirió a las altas tarifas de energía eléctrica y gas, a la mano de obra, y a insumos como abonos, agroquímicos y combustible, que están en dólares. En el NEA, en cambio, la mano de obra encabeza la lista de costos.
-¿Ustedes consideran que deberían recibir una asistencia adicional?- le preguntamos.
-Claro, ¿pero por qué? Porque corresponde por derecho, porque el tabaco es exportable. En el caso de las provincias del NOA, donde tenemos productores que tienen arriba de 50, 100, 200 o 300 hectáreas, hay un alto costo para producir. Eso es lo que corresponde ir poniendo en equilibrio, para que todos podamos seguir formando parte de un sistema productivo, podamos seguir siendo competitivos, y esto le lleve a la nación más recursos
Hay que aclarar aquí que además de los altos costos, el panorama también se complicó por el retraso en el tipo de cambio y por factores externos como una sobreproducción en Brasil y en Zimbabue -otros países de relevancia en este rubro-, lo que tira los precios a la baja.
-¿Qué expectativas tiene para la reunión que se realizará a mediados de febrero?
-Las expectativas para nosotros son de una presión permanente por parte de todos los gastos y costos que hemos tenido para producir. Hoy la premura para nosotros no solamente es fijar el precio, sino un precio acorde y adecuado. Cuanto más se demora, mayores son los costos financieros que nos van aplicando. La vamos a luchar. Vamos a pelearla porque de lo contrario los productores no van a poder seguir, y nuestra obligación es luchar hasta el final, lograr un buen resultado por el bien de todos y del equilibrio de esa balanza productiva, comercial y exportadora.