El caso de Villa Saralegui, considerado la primera gran rebelión fiscal de los productores agropecuarios, es una especie de fantasma que sobrevuela detrás de cada nueva causa vinculada a las tasas viales.
Y no casualmente lo es, pues aquello que comenzó como un pedido marginal de información pública para conocer qué se hacía con el dinero de los productores, derivó en la destitución del jefe comunal y una mega investigación por enriquecimiento ilícito que en la tarde de ayer tuvo su capítulo final: El ex mandatario Walter Solá y su hijo Nicolás fueron detenidos.
La del “Clan Solá”, como lo llaman muchos vecinos de esa comuna ubicada a unos 30 kilómetros de San Justo, es una historia que excede a la red de caminos rurales pero que en cierto sentido se termina gracias a ello.
“La cadena se rompe por el eslabón más débil”, reza el famoso dicho. Ese eslabón fue el crudo enfrentamiento que, de manera personal, mantuvo Walter Solá con los productores de la zona, quienes en 2022 iniciaron sus reclamos por el alto costo de las tasas y la falta de una contraprestación efectiva.
El propio Solá, en cierto sentido, colaboró para que ese eslabón se hiciera cada vez más débil. Junto a su hijo, le dieron una golpiza a uno de los productores en pugna y además cuñado de José Luis Espert, Leonardo González Kees. Meses después, en febrero del 2023, fue acusado de haber ordenado balear al principal dirigente opositor, Matías Gamboa.
A Ud. Gobernador de Santa Fe @omarperotti le pedí que interviniera en Villa Saralegui donde gobierna un violento como el Sr. Walter Sola. Ni bola me diste. Acá los resultados. La vieja política, de espaldas a la gente.https://t.co/xefHzAneFD vía @unosantafe
— José Luis Espert (@jlespert) October 4, 2022
El inicio del fin llegó con el desembarco de un mediático abogado penalista, llamado Pablo Abdon, cuando el caso adquirió tenor nacional y los productores pidieron que se investigara a dónde iba a parar el dinero que aportaban mes a mes.
Fue entonces cuando se formalizó una denuncia penal, que luego derivó en una investigación por malversación de fondos y el apartamiento de Sola.
En marzo del año pasado, por aprobación del Senado provincial, la comuna fue intervenida y el jefe comunal destituido. Hoy, está tras las rejas.
Según informó el medio Sur24, la policía allanó ayer una mutual, un hotel, un estudio contable, comercios y viviendas particulares vinculadas a los Sola, en el marco de una investigación judicial por enriquecimiento ilícito. Quien la lleva adelante es la fiscal de Delitos Complejos del MPA, Bárbara Ilera, que ha logrado apresar al ex jefe de la comuna y a su hijo.
“Ayer fue un día histórico. Me emocionó mucho”, expresó esta mañana el cabañero Leonardo Kees en diálogo con Radio Amanecer, de Reconquista.
Por desgracia, Kees fue uno de los protagonistas de esta larga historia, signada por la malversación de fondos, la violencia y la política caudillista. Métodos que, igualmente, no resistieron a la agrupación de los productores que, cuando ya no tenían nada que perder, decidieron darle la espalda a su mandatario y dejar de pagar las tasas, que se habían incrementado en un 400%.
Además de la causa de enriquecimiento ilícito, destapada en gran medida por ese primer paso de los vecinos, Walter y Nicolás Sola irán a juicio oral por “lesiones, daños y amenazas” contra Kees y el ex jefe comunal también enfrenta cargos por instigar una tentativa de homicidio contra su opositor político.
“Se lo llevaron preso, que es donde tiene que estar. Después tendrán que devolver todo lo que robaron que, se estima, ronda entre los 8 y 10 millones de dólares”, expresó el titular de la cabaña “Los Retoños” en declaraciones con Radio Amanecer.