Desde varias semanas antes del 10 de diciembre se decía que Germán Paats iba a ser subsecretario de Agricultura del nuevo gobierno de Javier Milei, como vértice de un tridente compuesto por Fernando Vilella, que fue designado como secretario en ese área y por Pedro Vigneau, que iba a ser el jefe de Gabinete. Pero el diablo metió la cola.
Un comunicado de CRA (Confederaciones Rurales Argentinas) salpicó el nombre de Paats. Aunque sin mencionarlo, la entidad reprobó a los “incumplidores” del agro, a quiene presentó como “los que, comercialmente hablando, desaparecen, llegan a una zona, realizan varias operaciones y de repente nadie más los ve, solo quedan las consecuencias, los lamentos y las pérdidas”. Frente a la acusación, el ex presidente de la Fundación Barbechando no ocultó que le había ido mal en un proyecto para instalar un criadero de cerdos en Tapalqué, donde además había sido presidente de la sociedad rural local. Pero argumentó que ese proceso fallido estaba siendo normalizado por los carriles normales.
Como sea, y sin ofrecer ninguna explicación, luego de ese episodio el secretario Vilella decidió bajar a su amigo y colaborador de la secretaría de Agricultura, y nombró allí a un productor cordobés y empresario del bioetanol Germán Di Bella. A Paats, sin embargo, lo sostuvo como parte del círculo fundacional de su gestión en la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca. Frente a más de un centenar de empresarios lo presentó como uno de sus principales asesores que trabajaría codo a codo con Vigneau.
Hasta este miércoles 27 de diciembre, cuando se supo que Germán Paats no será parte del equipo de Vilella ni siquiera desde ese rol secundario.
“Desde Economía reclamaron la cabeza de Paats”, fue la primera versión que recibió Bichos de Campo. Luego, al consultar directamente con la Secretaría de Vilella, la respuesta fue edulcorada: “La salida de Germán Paats responde a una decisión personal”, se explicó.
Era finalmente una confirmación y el fin de una carrera política demasiado fugaz en el nuevo gobierno: El empresario rural, ex presidente y fundador de la prolífica Fundación Barbechando, no llegó ni siquiera a ser nombrado, ni como asesor ni como subsecretario.
Una lastima “perderlo” a Paats en este momento. Considero que es la persona indicada para esta etapa.