El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, se reunió este martes con autoridades de la Cooperativa de Tabacaleros y la Cámara del Tabaco de esa provincia, la principal productora de tabaco del país, para plantear la posibilidad de “complementar” la producción de tabaco con la de cannabis con fines medicinales. De este modo, el mandatario provincial bajó muchos tonos de su propuesta anterior, que hablaba de reemplazar un cultivo por otro.
El ministro de Desarrollo Económico y Producción jujeño, Exequiel Lello Ivacevich, manifestó que en este reunión se invitó formalmente en los próximos días a los productores a un encuentro para tratar el “tema del cannabis ya que hay mucho interés de muchos productores en mutar parte de su producción y complementar su producción tabacalera”, afirmó.
“De ningún modo se trata de reemplazar sino de dar nuevas opciones porque sabemos que en los últimos años los productores tuvieron algunas cuestiones con sus producciones y sus economías”, se ocupó de aclarar especialmente el funcionario.
No es lo que había dicho Morales, el gobernador, al hablar a principios de marzo ante la asamblea legislativa. Allí, al ensalzar su plan para que Jujuy lidere la producción de cannabis medicinal, pidió: “Que todos los productores de tabaco planten cannabis, porque van a ganar mucha más plata y le van a dejar más renta a la provincia, vamos a poder cobrar más impuestos y tener más recursos para darla a la gente que menos tiene”. Y hasta exageró con una reconversión total, para que “de aquí a diez años dejemos de plantar tabaco y plantemos cannabis“.
Aquellas palabras, por cierto, cayeron bastante mal en la comunidad tabacalera jujeña, un sector que es el principal generador de empleo después del Estado. En Jujuy hay cerca de 15 mil hectáreas dedicadas a ese cultivo, que se ha hecho durante varias generaciones y cuenta con un complejo sistema de ingresos a través del Fondo Especial del Tabaco. En cambio, lo del cannabis es una aventura incipiente apuntalada por el propio Morales, a través de su propio hijo, en un terreno fiscal y con mano de obra del Estado. Por ahora hay solo 1,5 hectáreas implantadas con esa planta, y se aspira a llevarlas este año a unas 35 hectáreas.
Ivacevich (en la foto), que se ocupó de bajar el tono a la polémica con los productores, explicó que el Gobierno provincial “avanza en esta alternativa para mostrarles a los tabacaleros y que la conozcan, y que en su momento decidan invertir, transformarse o seguir en el sector del tabaco”.
Por otra parte la reunión con los productores permitió acordar una agenda respecto al 20% del FET, “ya que existen algunos planteos a nivel nacional de destinar ese fondo hacia otros fines”, sostuvo. El funcionario jujeño recordó que ese porcentaje, por cifras millonarias, “pertenece a los productores y tiene que ser en planes destinados a la producción, que es lo que permite generar esta fuente de empleo tan importante en esta región de la provincia como lo son los valles”.