Gabriel Zadikian es un economista argentino que vive hace más de 20 años en Uruguay y allí hace agricultura en un campo ubicado en el centro del país. Pero desde hace dos años está experimentando resultados muy positivos con la ganadería bajo la modalidad del pastoreo racional intensivo y rotativo propuesto por Voisin, y que se presenta como un sistema regenerativo de los suelos. El tipo no lo hace solo por romanticismo, ya que esto que involucra un planteo agroecológico sin uso de insumos, sino porque además los resultados económicos saltan a la vista: pasó solo en dos años de producir 100 kilos de carne por hectárea a 225 kilos.
Gabriel señala que esto recién está comenzando y el techo es mucho más alto.
“Hace dos años fui al campo de un amigo que estaba empezando con esto, y llevé a mi administrador. Nosotros hasta entonces teníamos relegada la ganadería a aquellas zonas marginales donde no se podía hacer agricultura y bajo la modalidad extensiva. Las vacas andaban por ahí”, contó Zadikian a Bichos de Campo.
Aquí la entrevista completa con Zadikian:
Como dicho esquema le llamó la atención, empezó a manejar su rodeo en el mismo sitio pero con el concepto de manada que propuso Voisin. Es decir, manejando los animales con alambrados eléctricos, determinando que todos coman y bosteen de forma intensiva en un lugar antes de pasar a otro lote, para que los pastizales tengan tiempo y fertilidad natural para regenerarse.
“Cualquiera puede hacer esto, pero hacerlo bien es otra cosa. La planificación es clave y requiere mucho tiempo en el campo, observando, para que luego todo se transforme en un espiral virtuoso, no es que producimos carne ni pasto, sino que regeneramos el suelo. Este a su vez hace crecer de tal forma a las pasturas y por ende los kilos de carne aumentan”, explicó.
Zadikian confiesa que los resultados son fabulosos y no hay ningún tipo de disociación entre lo económico y lo ambiental, Y lo dice un economista justamente. Cuenta incluso que en este momento está sacando una parte del campo que dedicaba a la agricultura para pasar a incrementar el área de ganadería regenerativa. “Resulta muy competitivo, y si la soja volviera a los precios de hace cinco años creo que también lo haría”, afirmó.
Pero no todo es el resultado económico. “Como seres humanos hemos hecho lo que quisimos con la naturaleza y hasta hemos puesto animales en confinamiento. Es hora que cambiemos el paradigma y empecemos a internalizar estos conceptos que requieren apertura mental”, finalizó Gabriel.