Alguien que quiere mucho, pero mucho, a Ezequiel Wainer nos contó confidente que este hombre de algo más de 40 años es vegetariano por decisión propia desde los 8 años de edad y que no hubo manera de hacerlo dar marcha atrás. “Actúa por convicción. Es una ‘rara avis’ que vive muy parecido a lo que piensa”.
Cosa extraña encontrar en la política a alguien así. Pero desde hace poco más de un año este ingeniero agrónomo decidió probar suerte en la gestión pública, y en un puesto difícil por la complejidad de los temas que le tocan: es el director de Agricultura Familiar y Desarrollo Agrario del Ministerio de Desarrollo Agrario (MDA), a cargo del economista Javier Rodríguez. Ezequiel, como parte de ese equipo, es uno de los principales estrategas para hacer crecer la “agroecología” en la provincia de Buenos Aires durante la gestión de Axel Kicillof.
-¿Y cómo llegaste a estar ahí?
-Es mi primera experiencia en la gestión pública. Yo vengo de estar trabajando en el sector de la agricultura familiar y con la producción agroecológica, en Florencia Varela, a través de un centro de educación popular que se llama Cedepo (Centro Ecuménico de Educación Popular), donde me formé. Me recibí y ahí pude desarrollar toda esta especialización en lo que es el sector de la agricultura familiar y también en la agroecología.
-¿Pero por qué decidiste convertirte en funcionario?
Mirá la entrevista completa a Ezequiel Wainer:
-Hay una percepción equivocada en mucha gente que asocia a la provincia de Buenos Aires con los grandes estancieros. Todas las ciudades tienen cinturones hortícolas conformados por miles de pequeños productores.
-Justamente el cinturón flori-frutihortícola es el mas grande del país, lo que es La Plata, Berazategui y Florencio Varela. Y se suma el cordón de Gral. Pueyrredón, el segundo más importante de la provincia. En el cintuturón de La Plata hay más de 5.000 familias que se dedican a esto. Pero a la vez estamos pensando que la agricultura familiar no es solo esa, la hortícola. La agricultura familiar, por concepción, la conforman es todo aquella donde la mano de obra principal es familiar y el ingreso principal de la familia es la producción agrícola.
-Así que perfectamente puede ingresar en esa categoría un productor ganadero de Patagones u otro con 200 hectáreas agrícolas en Rojas. Tenés una diversidad asombrosa de situaciones en la provincia…
-Así es. Y en la provincia no había una política específica. Por el contrario, había una suerte de desvalorización de ese sector. Había un montón de programas que estaban apuntados a fortalecer la agricultura familiar, que fueron desapareciendo. Es el caso del cambio Rural, donde se achicaron muchísimo la cantidad de grupos.
-¿El gobierno de Kicillof propone desandar ese sendero?
-Nosotros recientemente lanzamos el programa de Desarrollo Rural bonaerense, que viene a reflotar el viejo Cambio Rural, pues se brinda la posibilidad de que productores asociados en grupos pueden tener asesoramiento de un técnico financiado parcialmente por el Estado, para poder desarrollar proyectos asociativos que permitan mejorar la producción.
-¿Ya está en marcha ese programa?
-Ya está en marcha. Hay una convocatoria que cierra en breve. Luego se van a desarrollar en una primera instancia 100 grupos en todo el territorio de la provincia.
-Vos venías de trabajar en el cinturón verde de Florencio Varela. ¿No es una preocupación oficial el crecimiento desordenado de las ciudades que va corriendo a los pequeños productores?
-Es una de las principales problemáticas de la agricultura familiar, que tiene que ver con la informalidad en la que llevan adelante los pequeños productores sus explotaciones. Hicimos hacia final del año pasado un relevamiento sobre el tema de los alquileres que mostraba la irregularidad que había en materia de alquileres. Mostró que había aumentos indebidos, que la mayoría estaba sin contratos, con plazos que no permitían diseñar proyectos de largo plazo. Lo que nos pidió Javier Rodríguez es información para poder generar políticas públicas. Entonces lanzamos ese relevamiento que lo estamos continuando este año para poder mantener una línea. Porque lo que muchas veces uno ve al costado de la ruta, las malas condiciones de vida en que viven muchos productores, tiene mucho que ver con que no se les permite construir viviendas de material. Esas malas condiciones se dan porque no está regulado a fondo el tema de los alquileres.
-¿Y no hace falta trabajar mejor en una planificación de los territorios?
-Existe una clara falta de planificación entre lo urbano y lo rural. Algunos distritos la tienen, pero la gran mayoría no.
-La agenda de muchas organizaciones que acompañan la política oficial, como la UTT o el MTR, es que el Estado debería hacer alguna cosa para permitir el acceso de esos productores a un pedazo de tierra propia.
-Es realmente una problemática la cuestión de las tierras. Desde el Ministerio estamos acompañando el proceso, que a lo mejor es más fácil en sectores donde hay un interés municipal, con algunas tierras que pueden ser del municipio o la provincia, para generar colonias, y para poder permitir otra cosa, que es la producción local de alimentos. Porque también eso ha desaparecido en el interior de la provincia . Viajamos a muchas localidades donde no hay producción de verduras.
-Es la famosa lechuga que llega desde 300/400 kilómetros…
-Es una problemática que muchos secretarios de producción e intendentes nos han manifestado. Antes había y ahora no hay: ha desaparecido esa producción local y eso va asociado de la mano de que existan productores locales que se dediquen a esa producción. Lo mismo pasa con la producción de huevos, que viene toda de Entre Ríos o de algunas otras zonas. Y ni hablar de la producción animal, que tiene que ver con la faena. Desde el Ministerio se esta acompañando a 13 proyectos de restauración de frigoríficos de diferente escala, para que puedan estar en función de los productores de animales de la zona.
-Pero volvamos al tema del acceso a la tierra.
-No es un tema que sea solo del MDA. Eso lo estamos articulando con otros ministerios. Es un tema muy delicado para toda la población, Sin ir más lejos en una localidad del interior que no quiero nombrar, en la cual estamos trabajando para desarrollar en una tierra que es de la Provincia la posibilidad de armar una colonia, ya habían empezado a correr la voz que iban a traer 200 familias de no se donde, y que eso se iba a transformar en (no lo dejamos terminar)…
-¿Hay mucha carga ideológica en el asunto? No parece ser nada malo que alguien reciba un crédito para poder acceder a tierra productiva.
-Un sistema bien conocido como el leasing, que es entrar en producción y con el mismo alquiler vas pagando la tierra. Nos parece que es una política que andaría muy bien. Obviamente entiendo que tiene que ser una política llevada en concordancia con el gobierno nacional. Son lo que tienen la espalda suficiente como para poder llevar adelante esa política crediticia.
-¿Y te ilusionás realmente con que se produzcan avances en este gobierno?
-Sí. Me ilusiono. con la visión que tiene el MDA y con incluir al sector de la agricultura familiar en las políticas públicas. Se van desarrollando distintos programas. Entinedo que es una de las líneas de trabajo, pero no me quiero anticipar con tiempos porque a los mejor no termina surgiendo (una política de acceso a la tierra) en los tiempos que uno quisiera. La voluntad está.
-¿Por que todo lo que proviene de la pequeña agricultura familiar lo vinculan con la agoecología? ¿No hay agricultores familiares que no hagan agroecología?
-Sí, por supuesto que los hay. Lo que pasa es que el sector de la agricultura familiar fue el que hizo más fuerza para que se vaya desarrollando la agroecología en el territorio. Si miramos el cinturón hortícola del Gran La Plata, la gran mayoría no son agroecológicos, pero sí las organizaciones que llevan adelante el mayor desarrollo agroecológico se están dando en estos cinturones.
-¿Por qué?
-Es una ecuación muy fácil. El paquete tecnológico para producir de forma convencional está dolarizado, todos los insumos lo están, también los nylon para invernáculo, etcétera. Pero la producción se vende en pesos . La agroecología tiene una propuesta de producción menos dependiente de insumos externos. Se promueve una asociación de cultivos que permite que no haya una especialización en un solo cultivo sino que haya varios.
-¿Entonces la agroecología no era una posición cool y nada más?
-Para nada. La agroecología permite una autonomía del productor porque la mayoría de los insumos que utiliza en su predio lo termina desarrollando él mismo o son de fácil acceso y mucho mas económicos. A su vez hay un manejo totalmente distinto, porque en la mayoría de los casos la agroecología propone una forma de comercializar distinta, en la cual el producto se valora también como sano, que es lo que buscan los vecinos. La agroecología ofrece eso: un producto que no tiene agroquímicos y tiene un manejo distinto, más respetuoso del medio ambiente. Y no pasa solamente con la horticultura. En las producciones animales que practican la agroecología tienen un sistema de pastoreo rotativo que hace que las pasturas mejoren y se busca el bienestar animal, no hay confinamiento.
-Una de las primeras políticas de esta gestión del MDA fue crear un registro de productores agroecológicos y un sistema de certificación. ¿Ha habido avances o está todavía a media máquina?
-El programa provincial de promoción de la agroecología se lanzó hace poco más de un año en Tapalqué. Tiene distintas patas. Una de ellas es visualizar a los productores agroecológicos de la provincia. Lo que hizo el MDA es armar una convocatoria para que puedan solicitar su inscripción al registro. Desde el Ministerio se los va a visitar, se hace un relevamiento técnico y se determina si es un productor agroecológico o si está en transición. Luego se lo acompaña de las dos maneras. Después se están desarrollando políticas para que los productores registrados sean los sujetos prioritarios. No van a ser los únicos pero si van a tener prioridades.
-A full con la agroecología…
-Después hay otra pata que tiene que ver con las chacras experimentales, para que en todas ellas se desarrolle alguna línea de investigación vinculada a la agroecología, y la incorporación de los productores de la agricultura familiar para poder desarrollar alguna de las líneas que necesiten. Por ejemplo, en la chacra de Gorina, que está en medio del cinturón hortícola, se están desarrollando ensayos con biopreparados y para la producción de semilla y plantines de florales, para poder tener un insumo un pco más económico.
-…
-Por otro lado lanzamos los cursos de facilitadores en prácticas agroecológicas. Técnicos y habitantes de la provincia se pueden inscribir y una vez que aprueban los cursos (que son de ocho módulos y un trabajo final), pasan a formar parte de la red de facilitadores. Son las personas que estarán encargadas de ayudarnos a difundir la agroecología en territorio de la provincia, para detectar productores que no estén en el registro, y también para dar capacitaciones y promover las prácticas agroecológicas que, vuelvo a reiterar, son prácticas que fomentan la soberanía económcia de los productores.
-Usualmente cuando alguien pasa un año en la gestión pública o se vuelve un político conservador o pierde las ilusiones. ¿En qué estado estás vos?
-Estoy cumpliendo casi el año, pero estoy muy entusiasmado porque los que venimos del lado de la agricultura familiar y la agroecología vemos que esta es una posibilidad. El MDA está abierto para todos, también para este sector. La visión del ministro es que hay que trabajar con todos, de todos los tamaños y de todos los colores, y eso te permite trabajar distintas líneas. To tengo muchas expectativas de mejorar esto que es volver a recuperar la soberanía en cada una de las localidad, pues lo que más me mueve a mi es esto: promover la producción local de alimentos, que las familias puedan generar su propia fuerza de trabajo y poder ganarse el dinero a todos los días.