Este año la faena vacuna terminará en niveles muy altos en gran medida por la liquidación de rodeos de cría que desencadenó la sequía. Si bien en octubre se frenó el drenaje de vacas, entre esa categoría y la de vaquillonas se enviaron a los frigoríficos 815 mil animales más que el año pasado, que no darán un ternero en la zafra próxima.
La alta faena de vientres, en la medida en que el pasto vaya rebrotando por el regreso de las lluvias, debería impulsar su demanda y también los precios que por ahora siguen rezagados.
Al respecto, el analista Diego Ponti indicó: “Es un buen momento para entrar a reinvertir en la cría porque el precio en dólares está por debajo de los promedios históricos. Si bien en las últimas semanas mejoró, hoy una vaquillona preñada o con cría al pie vale 400 mil pesos, es decir 500 dólares, cuando el promedio de los últimos 10 noviembres fue 650 dólares. Está 30% debajo de ese rango”.
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Según el analista, también es buena la relación de precios con las otras categorías vacunas: “Vendiendo un novillo de 440 kilos hoy, con respecto de promedio de los últimos 6 noviembres, se necesita un 25% menos de kilos de novillo para acceder a un vientre preñado”.
“Hay chances de ingreso al negocio de la cría”, consideró el consultor de Az Group.
La relación de precios también es buena con los terneros. Con la venta de 2 se repone un vientre con cría al pie o preñado, y con su comercialización ya se recupera la mitad de la inversión.
El otro factor que debería alentar la compra de vientres es que por la caída en el stock de vacas y en las preñeces de este ciclo habrá menos oferta de terneros en 2024 y en 2025.
Ponti indicó: “Por dos años habrá menos producción de carne. Si miramos al largo plazo, el ganadero genera un producto que va a faltar porque hubo menos hembras en producción y las que estuvieron entraron el servicio de primavera en malas condiciones. Por eso es un buen momento para entrar al negocio”.