El vicepresidente de Senasa, el veterinario Rodolfo Acerbi, considera que por las nuevas demandas de los mercados y las necesidades argentinas de exportar más, el organismo sanitario necesitará incorporar más gente a su plantilla de personal.
El funcionario recordó a Génesis Rural que en el ex Ministerio de Modernización, durante la gestión de Mauricio Macri, se definió que el Senasa podía cumplir bien con sus funciones de control de la calidad y sanidad de los agroalimentos con una planta de 7000 empleados, pero que hoy están en 5.800, unos 1.200 abajo de ese ideal, y que además en 2023 está prevista la jubilación de otros 700 trabajadores.
Por eso, el vicepresidente de Senasa adelantó que intentarán que las autoridades nacionales les habiliten la posibilidad de tomar unos 1.500 empleados, sobre todo técnicos y profesionales, el año que viene.
Acerbi fue consultado además por la amenaza de la Influenza Aviar Altamente Patógena, enfermedad sobre la que manifestó mucha preocupación debido a su irrupción en varios países de la región, como Perú, Ecuador y Colombia: “Es una vaca loca más fiebre aftosa”, comparó la peligrosidad de esta zoonosis.
Acerbi, en relación a la obligación del troceo de la media res para la comercialización de carne, informó que en breve habrá una reunión del secretario de Agricultura Juan José Bahillo con los ministros de las provincias para resolver el tema. El 15 de enero vence la prórroga para su aplicación. Acerbi fijó posición: “la media res atrasa medio siglo, es como vender leche cruda”, enfatizó.