En la zona de Los Cerrillos, a unos 20 kilómetros al oeste de Villa Dolores, en Córdoba, hay un nuevo ensayo con papas, que consiste en producir una parcela con agroquímicos y otra sin.
Según César Gramaglia, agrónomo especializado en Agroecología y que trabaja en INTA Villa Dolores, todo comenzó a partir de una iniciativa planteada por Tamara Arregui, una estudiante avanzada de Agronomía de la Universidad Nacional de Río Cuarto, quien lo contactó porque quería realizar su tesis de grado sobre este tema.
A partir de esta inquietud, César decidió llamar a Antonio y Pepe Martínez, productores referentes en la zona núcleo papera, para comentarles la idea de efectuar un ensayo a campo con el objetivo de realizar un análisis comparativo entre el manejo convencional (con aplicación de fertilizantes artificiales y productos químicos) y un manejo ecológico. De esta manera, se estableció una articulación entre el sector público (el INTA y la Universidad de Río Cuarto) y privado. El ensayo se realizó durante el período julio/noviembre de 2022.
“Si bien la familia Martínez hace más de 30 años que se dedica a la producción de papa, esta fue una experiencia inédita vinculada al manejo de un cultivo sin la utilización de agroquímicos ni fertilizantes sintéticos”, cuenta César, que ya había entusiasmado con el mismo tema a Chiara Cardinali, cuarta generación de productores en esa misma zona, tal cual contó oportunamente Bichos de Campo.
Previo a la cosecha de este nuevo ensayo, organizaron una jornada de tranqueras abiertas para mostrar el cultivo de papa y compartir el manejo implementado tanto en la forma convencional como en la orgánica.
Visualmente, no se notaban diferencias entre ambos tratamientos en relación con la cantidad de plantas por unidad de superficie, altura de planta, área foliar y estado sanitario.
“Pasado unos 15 días, se efectuó la cosecha y la medición de los resultados; así pudimos derribar el mito de que no es posible lograr excelentes indicadores productivos y económicos sin la aplicación del paquete de tecnología de insumos químicos proveniente de la agricultura convencional”, manifiesta César y deja este cuadro en el que se ve que -por el menor uso de insumos-, los ingresos que deja una parcela de papa agroecológica han superado en casi 7% los de la papa convencional:
-En lo personal, ¿qué lo motiva a investigar y las formas de producir sin agroquímicos?
-El modelo dominante de agricultura industrial genera externalidades negativas sobre la calidad de los alimentos y del ambiente: degradación del suelo, contaminación del agua, resistencia a los plaguicidas, pérdida de biodiversidad y aparición de enfermedades agudas y crónicas en las personas. Por este motivo, a partir de mi formación profesional y, además, como integrante de la REDAE (Red de Agroecología del INTA) y participante de un proyecto estructural de la EEA INTA Balcarce, decido trabajar en el territorio junto con los productores para demostrar empíricamente que es posible y necesario producir alimentos con un enfoque agroecológico.
-Le van a decir que se trata de una parcela aislada y que no es posible realizar grandes producciones de papas sin agroquímicos. ¿Qué nos puede decir al respecto?
-Que gracias a los resultados logrados, la familia productora decide efectuar la siembra tardía (fines de febrero de 2023) de un lote de 5 hectárea para cosecharlo durante los meses invernales. Nuevamente verificamos que la producción de papa libre de agroquímicos ha sido similar a los lotes convencionales, con menores costos productivos y ecológicos. A fines de julio de este año se realizó la siembra temprana de otras 5 hectáreas con un manejo orgánico para realizar la cosecha en noviembre, gozando de excelente estado de salud y con expectativas de altos niveles de rendimiento. Si los resultados no fueran buenos, la familia productora no hubiese tomado esta decisión empresarial de continuar ampliando la superficie sembrada de papa con un enfoque agroecológico.
-A partir de esta experiencia, ¿hay algún productor interesado en producir papa de esta forma?
-A través del INTA Villa Dolores realizamos charlas, cursos de formación, jornadas técnicas y ensayos a campo con el objetivo de difundir los beneficios económicos, ambientales y sociales del diseño y manejo de agroecosistemas con bases agroecológicas. Estas experiencias exitosas representan “faros agroecológicos” que nos ayudan en la divulgación de los resultados positivos alcanzados y a lograr un efecto contagioso entre los productores para facilitar la transformación de los sistemas productivos actuales hacia modelos más sustentables.
-O sea que, para usted, este es el camino…
-La agroecología es una ciencia y una práctica que nos permite articular entre el sector público y privado, integrando los conocimientos científicos y empíricos, con el objetivo de trabajar sobre las dimensiones económicas, sociales y ecológicas a nivel territorial. Y nos facilita las herramientas para desarrollar paisajes y comunidades más sustentables, más inclusivas, más justas, más saludables, más biodiversas, más armoniosas y hasta más pacíficas.
-¿Por qué más pacíficas?
-Porque al desarrollarse las personas en un ambiente más sano, más limpio y con una alimentación basada en productos no contaminados se genera un impacto positivo sobre la salud física, mental y emocional. El aporte nutricional de los alimentos no se da solo a través de las sustancias (carbohidratos, proteínas, minerales, vitaminas) sino de las fuerzas vitales, y eso depende del modelo de producción. Por todo esto, la agroecología es el camino.
Se van a cansar de vender papa agroecológuca. Tenemos innumerable cantidad de pedidos…..
Cuál es la tecnología usada para reemplazar la fertilización con urea u otros nutrientes y diferencia entre siembra en febrero y julio
Que importante la labor de César en un territorio tan marcado por el agronegocio. Felicito a todos los compañeros que desde todos los INTAs dedican su labor a que vivamos en un país más justo y agroecológico.