El ministro de Economía Sergio Massa anunció este viernes la segunda vuelta del régimen del “dólar soja” que se extenderá hasta el próximo 31 de diciembre de 2022 con un tipo de cambio diferencial de 230 $/tonelada.
La medida, que ya venía siendo reflejada en los precios de la soja en las últimas jornadas, no genera sorpresa alguna entre los empresarios agrícolas, quienes ahora deberán considerar si aceptan o no la propuesta oficial que permitiría vender soja a un valor del orden de 85.000 $/tonelada.
Tal como sucedió durante la primera versión del régimen especial, los exportadores de poroto, harina y aceite de soja, además de biodiésel, se comprometieron a ingresar una cifra mínima de divisas, que en este caso será de 3000 millones de dólares (en la primera versión del régimen había sido de 5000 millones).
El propósito de Massa es que el nuevo régimen esté operativo ya la semana que viene para comenzar a recomponer cuanto antes las escasas reservas internacionales del Banco Central (BCRA).
El anuncio, realizado por el ministro de Economía esta tarde en la ciudad de Buenos Aires ante referentes de la cadena agroindustrial, se formalizará el próximo lunes con la publicación de una resolución en el Boletín Oficial.
La entidad que integra a las empresas agroindustriales exportadoras, es decir, los aportantes de divisas del régimen del “dólar soja”, emitieron un comunicado sobre la medida incluso antes de que el propio gobierno informara una sola línea al respecto.
“Vemos a esta nueva condición como una mejora que, aunque sea temporal, tendrá un impacto directo en el precio de la soja en el mercado interno”, señaló Gustavo Idígoras, presidente de Ciara-CEC, en el comunicado.
Idígoras resaltó “que la decisión de venta de soja está siempre en manos del productor y será él quien decida cuándo vender, entendiendo que en esta oportunidad el tipo de cambio va a durar únicamente hasta fin de diciembre”.
Tal como anticipó Bichos de Campo, se reintroducirá el diferencial en retenciones para los exportadores de harina y aceite de soja. Las ventas externas de productos procesados dejarán de abonar una alícuota del 33% de derechos de exportación para pasar a tributat un 31%, mientras que el poroto seguirá con una alícuota del 33%.
El gobierno, tal como sucedió durante la primera versión del “dólar soja”, mantendrá la posibilidad de derivar los pesos resultantes de las ventas de soja a cuentas bancarias especiales que se actualizan en función de la evolución del tipo de cambio oficial. Vale recordar que, al vender poroto en el marco del “dólar soja”, los empresarios agrícolas quedan inhabilitados para poder comprar dólares en el mercado bursátil (MEP).
Hacen eso porque son bobos
Lpm quien tiene soja todavía.?