Dos productos tradicionales del agro argentino, el té de Misiones y el norte de Corrientes, y la miel de flores de Atamisqui en Santiago del Estero, han sido reconocidos por las autoridades de la Secretaría de Agricultura de la Nación, que creó dos nuevas Indicaciones Geográficos para identificarlos y promover sus ventas en el mercado global.
Mediante la Resolución 126/2024, el organismo se hizo eco del pedido de los productores de té del NEA, que es el de producción más austral en todo el planeta, y aprobó el registro, protección y derecho de uso de la Indicación Geográfica Té Argentino”, ya que “#se encuentran cumplidos los requisitos técnicos-legales para el registro, protección y derecho a uso de esa suerte de marca regional.
La iniciativa tiene el aval del Gobierno de la Provincia de Misiones, donde se concentran los teáles. Y pasó por el filtro de la Comisión Nacional Asesora de Indicaciones Geográficas (IG) y Denominaciones de Origen (DO) de productos agrícolas y Alimentarios. Ese órgano, creada por la Ley 25.380, se expidió a favor de esta economía regional el 14 de noviembre pasado.
“Gracias a la articulación entre el gobierno de Misiones, el gobierno nacional y la Asociación de Té Argentino, el té producido en la provincia obtuvo su Indicación Geográfica (IG), un reconocimiento que protege su autenticidad y realza su calidad ante el mundo. Esta distinción resguarda la identidad del té argentino, promoviendo su valor cultural y abriendo oportunidades en mercados internacionales”, se destacó desde la provincia de Misiones en ese momento.
A partir de allí, el secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, oficializó este IG al aprobar un protocolo de producción específico, como marcan las reglas. El área de producción está delimitada conforme al siguiente mapa:
Por otro lado, Agricultura publicó en el Boletín Oficial de este jueves la Resolución 127/2024. que establece la Indicación Geográfica para la Miel de Flores de Atamisqui de Santiago del Estero. El atamisqui es un arbusto característico del noroeste argentino. De su usufructo por las abejas se obtiene una miel monofloral, que puede ser perfectamente identificada y ubicada en toda la provincia de Santiago del Estero. Ya hubo otras miles, como la de Flores de Azahares de Tucumán, que habían hecho este mismo recorrido para contar con su identificación regional.
La miel de flores de Atamisqui es el primer producto alimenticio en obtener un sello de IG en la provincia de Santiago del Estero y también la primera miel monofloral con Indicación Geográfica en el país, obtenida a partir de un arbusto nativo y no de una plantación de limones, como en el caso anterior de Tucumán. En el caso del té argentino, la yerba mate misionera y del norte de Corrientes ya contaba con una denominación de origen.
Otra miel argentina tiene su Indicación Geográfica oficializada: La Miel del Monte Nativo Cordobés
Además de una gran cantidad de vinos que se valen de este recurso de la IG, la Secretaría de Agricultura viene aprobando desde hace años una serie de producciones regionales reconocidas como características de una zona y forma de producción. Los primeros expedientes fueron el chivito neuquino, el salame de Tandil y el cordero patagónico. Luego se sumaron el salame de Colonia, el Melón de San Juan, el alcaucil platense, la yerba mate y la miel de azahares de limón.
Una de las grandes impulsoras de que esta miel santiagueña se sume a la lista es la Cooperativa de Trabajo COOPSOL Ltda., establecida en 1992 e integrada por 14 socios, que cuenta con 1.300 colmenas bajo certificación Bio y desde hace diez años destina su miel a mercados de “Comercio Justo”, aprovechando los recursos naturales ofrecidos por la eco-región del Gran Chaco Americano.
Excelente nota sobre el Te Argentino. Quiero destacar que fue un trabajo mancomunado entre el INTA Centro Regional Misiones, INTI y Ministerio del Agro y Producción de Misiones.