En una entrevista radial, este sábado el secretario de Agricultura, el dirigente massista Jorge Solmi, puso en duda que la apertura de las exportaciones de vaca conserva a China, que fueron anunciadas con bombos y platillos esta semana por el gobierno, pueda llegar a incluir en una primera instancia los stocks acumulados en las cámaras de los frigoríficos exportadores.
Al hacer el anuncio, el martes pasado, el nuevo titular de esa cartera, Julián Domínguez, fue contundente respecto de que la apertura de las exportaciones de vacas viejas para China incluiría también la carne en stock (de animales ya faenados estos meses de cepo), la que calculó en unas 50 mil toneladas. Esto, además de la carne de unas 140 mil animales en pie que supuestamente quedan en los campos y deben enviarse al matadero.
Pero ahora, en una entrevista con La Red Rural, Solmi no fue tan concluyente como su superior. El secretario incluso no pudo aclarar si la nueva resolución, que dijo está en preparación este fin de semana, incluiría un permiso especial para exportar la carne de esa vaca conserva a China incluyendo los siete cortes prohibidos hasta el 31 de diciembre, como el asado, el matambre y la cuadrada.
“La resolución se está trabajando y va a estar montada sobre el decreto que ya existe, Esta es una resolución más que prevemos que esté lista para el lunes”, dijo Solmi.
-¿Va a haber una diferenciación entre la carne de hacienda ya faenada y la de nueva faena o se libera todo?- quiso saber uno de los periodistas de La Red Rural.
-Estamos trabajando en eso. La realidad es que el planteo que tuvimos de las entidades, validado por el INTA y las universidades, apunta a unas 140 mil vacas que están sin faenar. La idea primaria era abrir primero lo nuevo (por las vacas que siguen en los campos) y luego veremos como ir resolviendo otros esquemas. El enfoque del trabajo era ir por lo nuevo.
Esta es la nota al secretario de Agricultura:
En otro párrafo polémico, que aleja la idea de que la verdadera intención de la nueva conducción del Ministerio de Agricultura sea acordar las políticas con la Mesa de Enlace y avanzar hacia una liberación paulatina de las exportaciones, Solmi remarcó que la carne vacuna es considerada un “bien cultural” de los argentinos, como afirmó Domínguez.
“Es que lo es. Y el mismo IPCVA (Instituto de Promoción de la Carne Vacuna, que integran ruralistas y frigoríficos) habla de eso. Hay publicaciones del IPCVA que hablan del valor cultural de la carne y que ‘el asado nos une'”, afirmó el funcionario ligado a Sergio Massa, que fue ratificado en su cargo por el nuevo ministro.
En el mismo sentido, Solmi explicó que la gestión actual está abocada a resolver una situación “urgente” respecto del mercado de la carne vacuna. “La situación de hoy es que la carne bovina es un valor cultural y no lo decimos nosotros, lo dice el IPCVA”, estableció.
La urgencia, de acuerdo con esta mirada, pasaría porque la carne disponible actualmente no alcanzaría para atender el consumo interno y también la exportación, y esto fuerza que el gobierno deba intervenir limitando los envíos al mercado exterior. “Tenemos las mismas vacas que en 1978 mientras la agricultura se multiplicó por cinco. Hoy tenemos un sistema que cruje”, explicó el secretario ligado a Sergio Massa.
Como su superior, el ministro, el secretario de Agricultura cree que no corresponde hablar de cepo ni de cierre ni usar “palabras negativas”. Dijo que en 2020 la Argentina tuvo “la mayor exportación del siglo entero” y que “este año será la segunda mayor exportación, lo cual es evidentemente falso porque en 2019 se exportó más de lo que se prevé para 2021.
-El ministro dijo que el sistema no aguanta exportar mas del 24%. ¿Cómo van a manejar eso?
-Estamos trabajando de acá a diciembre para solucionar el tema de hoy. El camino que sigue es pensar una ganadería nueva.
Solmi, con este razonamiento, intentó destacar las nuevas herramientas que, para mejorar la productividad ganadera, figuran en la flamante Ley Agroindustrial que el gobierno enviará al Congreso sin fecha cierta de sanción. Allí se proponen una serie de estímulos fiscales de largo plazo (cinco años, con posibilidad de renovarlos por otros cinco) para los productores ganaderos.
Además destacó que esta semana se habilitó la posibilidad de que los ganaderos puedan acceder a los créditos subsidiados del Banco Nación, luego de que el Banco Central removiera una traba que afectaba a 38 mil productores, 800 feedlots y 3.000 tamberos que por las características de su actividad debían conservar un stock de soja o trigo en su poder. Hasta aquí el gobierno consideraba que quienes guardaban 5% de sus cosechas o más eran acaparadores.
En la entrevista, el viceministro de Agricultura defendió la intervención del Estado regulando las exportaciones cuando es necesario y se sumó a las advertencias de Domínguez respecto de que estos controles puedan extenderse a los mercados de trigo y maíz, que también son considerados “bienes culturales” por el gobierno.
“El libre comercio como se plantea no existe en el mundo” enfatizó Solmi, quien contó que desde Agricultura realizan un monitoreo constante de las exportaciones de trigo y maíz para evitar que se excedan más alá del cálculo de saldo exportable de las autoridades.
“Estamos siguiendo día a día como vienen las anotaciones de las exportaciones y la demanda interna. Y si hubiera que tomar alguna decisión se tomará”, definió el funcionario, que recordó que ya en diciembre del año pasado se interrumpieron temporalmente las exportaciones de maíz “y no pasó nada”.
Mas de lo mismo. De los burros solo se pueden esperar patadas.
El daño que hacen estos INUTILES a la producción y la perdida de un TIEMPO que no se puede recuperar !!!!! Hay que juzgarlos y fusilarlos por traición a la patria !!!!!!!