La empresa nació en 1963 y lleva el nombre de la ciudad santafesina donde está radicada. Los fundadores son las familias Ingaramo y Pisech, que siguen a cargo de la empresa. Desde sus inicios se dedicó a abastecer al mercado doméstico pero en los últimos años lanzó una serie de inversiones para desarrollar el abastecimiento a los mercados internacionales, especialmente al chino, donde tiene sus principales clientes.
Recreo faena actualmente 500 animales por día y cuenta también con 500 empleados. De lo que faena, el 75% lo destina a la exportación y el otro 25% el mercado interno.
En 2013, comenzaron a exportar a la Unión Europea. En 2018, cuando ya habían logrado comercializar con Rusia, obtuvieron la autorización para vender a China. En 2023, obtuvieron el primer cupo Hilton de 260 toneladas, que pasó a 380 el año pasado, ya que pudieron utilizar lo que otras firmas no lograron cubrir. Este año, por su parte, recibieron otras 330 toneladas de ese mismo cupo.
En paralelo, venden carne a Estados Unidos, un mercado en el que Argentina tiene una cuota de 20.000 toneladas con preferencia arancelaria. Todo esto les permite una mejor integración de la res vacuna destinando a cada país los cortes que mejor pagan.
Pero, para lograr esa inserción internacional, tuvieron que hacer fuertes inversiones: “Ampliamos la capacidad de congelado y de las cámaras de frío y oreo, automatizamos procesos y mejoramos toda la línea de faena y empaque”, explicó Gustavo Quirelli, gerente general de la empresa, que señaló que aún les queda pendiente avanzar con la obra civil.
De hecho, esa inversión está en carpeta porque no todas fueron rosas para Recreo, considerando que durante el año pasado, y hasta marzo de 2025, debieron sortear varias dificultades. “A pesar del alto volumen de exportaciones que se alcanzó fue un año complicado para la industria, sobre todo el último tramo”, agregó el empresario.
Esto tuvo que ver con la menor oferta de vacas que se da en los segundos semestres, lo que impacta en la actividad de estas empresas que tienen el negocio fuertemente orientado a la venta de carne a China. Pero, además, tuvo que ver con los problemas de competitividad exportadora y cambiaria del país, y la suba de costos laborales y energéticos que se dieron por el sinceramiento tarifario.
“Habíamos reducido la faena a cuatro días por semana por falta de oferta de materia prima y porque no había negocio en el comercio de carne. Por suerte, eso se revirtió gracias a los mejores precios que paga China y a la recuperación de la oferta de vacas”, señaló el directivo de Recreo.
Según contó, los importadores asiáticos están pagando los cortes por encima de los 5.000 dólares en promedio, cuando el año pasado el valor era de entre 4.000 y 4.500 dólares por tonelada.
“Esa mejora de precios se traslada mayormente al valor de la materia prima debido a la baja oferta y la fuerte competencia. Este es un mercado de competencia perfecta, en el que se expresan con claridad la oferta y la demanda por la multiplicidad de actores de uno y otro lado”, destacó Quirelli.
En efecto, en las últimas semanas está aumentando el precio de las vacas, especialmente las de conserva y manufactura, que en estos días se negocian en un promedio de 1.500 pesos, 300 pesos más que unas pocas semanas atrás.
De todos modos, agregó el empresario, “en el ciclo uno se puede hablar de que el resultado es positivo y más cuando se le agrega valor con el desposte en el ciclo dos”.
A modo de cierre, Gustavo Quirelli también se refirió a las perspectivas que tiene el negocio internacional de la carne vacuna, tras el final del período de mayor demanda pero con las ventas aún en buenos niveles.
“La demanda europea sigue fuerte y aparentemente no bajaría tanto los meses venideros como en otros años. China sigue necesitando carne y los precios de lo que le vende Brasil no bajaron, lo que es un dato auspicioso ya que eso marca la tendencia”, explicó.
En ese sentido, si bien la expectativa en cuanto a los precios es buena, la preocupación en el sector hoy reside en si efectivamente alcanzará la provisión de hacienda. “La oferta de vacas este año está bajando y no se espera que mejore la de novillos”, observó el empresario.