En su reporte semanal sobre la evolución de los cultivos, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires dio por concluidas las tareas de recolección del girasol en la campaña 2019/20, con una producción acumulada de 3,4 millones de toneladas. Los altos rendimientos, que fueron récord, permitieron compensar con creces la caída de la superficie sembrada al principio de esta temporada.
“En la última semana se ha avanzado con la recolección del área remanente de la oleaginosa, cubriendo el 100 % de los lotes. El rinde promedio nacional para el ciclo 2019/20 se ubicó en 22,2 qq/Ha (quintales por hectárea), el valor de rinde más alto de las últimas 20 campañas. El volumen total de producción alcanzado fue de 3,4 millones de toneladas”, destacó el PAS (Panorama Agrícola Semanal) elaborado por los técnicos de la Bolsa.
Distribuidas por zonas, esas 3,4 millones de toneladas de la oleaginosa llegaron desde el NEA (con 577.459 toneladas), el Centro-Norte de Santa Fe (con 509.328 toneladas), el Sudoeste de Buenos Aires y Sur de La Pampa (con 645.591 toneladas) y el Sudeste de Buenos Aires (con 885.969 toneladas). Los últimos cuadros que quedaban por trillar estaban ubicados justamente en Buenos Aires y La Pampa.
Los rendimientos récord, producto de las mejores lluvias, sirvieron para compensar la menor siembra en la primavera pasada. “El área destinada a este cultivo sufrió una caída de 15,8 % respecto a la campaña pasada, acercándose al promedio de superficie sembrado durante las últimas 5 campañas. Sin embargo, el rinde medio nacional de 22,2 quintales ha establecido un nuevo récord histórico y ha permitido alcanzado un volumen de 3,4 MTn, un 5,7 % superior al volumen promedio del último quinquenio”.
El rendimiento nacional promedio fue tan elevado gracias a que los núcleos girasoleros del norte del área agrícola, las regiones NEA y el Centro-Norte de Santa Fe, se lucieron al haber registrado rindes que superaron en 2 y en 1,5 qq/Ha respectivamente a los alcanzados en el ciclo previo”.
El girasol es un cultivo de suma importancia en las regiones agrícolas periféricas, a punto tal que puede ser considerado como una economía regional. La mayor parte de la producción se procesa además en plantas aceiteras locales, sinedo muy minoritarias las ventas al exterior de la semilla sin procesar.
La caída del área sembrada en esta campaña había obedecido a los precios de quebranto que habían cobrado los productores, especialmente en el norte del país, durante la campaña anterior. Esta situación, así como otras novedades de la cadena girasolera, las contamos en un programa especial de Bichos de Campo sobre este cultivo. Miralo: