Desde que es precandidato a Presidente, el ministro de Economía, Sergio Massa, comenzó a hacer anuncios casi a diario. Pero cuando todavía no lo era, hizo un anuncio para la producción agropecuaria cooperativa al cual se lo está comiendo la voracidad inflacionaria.
Hace poco más de un mes, Massa concurrió con el secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, hasta la sede de Coninagro a decirles a los dirigentes de esa organización que Agricultura les otorgaría un fondeo de 1.000 millones de pesos para las cooperativas adheridas.
Según el anuncio, se conformaría un fondo rotatorio que iba a ser administrado dese la cúpula de la entidad cooperativista y que permitiría socorrer con capital de trabajo a productores que no están bancarizados. Obviamente, debido a la gravedad que tuvo la sequía, desde ese mismo momento las autoridades de Coninagro comenzaron a recibir una lluvia de pedidos que conforman ya una larga lista.
La noticia ahora es la no noticia, porque desde entonces no se supo más del tema. Por ahora el anuncio solo quedó en eso, un anuncio.
“El dinero no apareció, lo que suponemos es que está trabado por cuestiones administrativas”, dijo Elbio Laucirica, el titular de Coninagro y gestor de las negociaciones con las autoridades, que son semejantes a las que Agricultura mantuvo con otras organizaciones cooperativas más cercanas al oficialismo, como la Fecofe.
“La administración pública muchas veces es una máquina de impedir y este es un ejemplo de eso”, se quejó el dirigente ruralista.
Teniendo en cuenta la inflación del último mes ya se produjo una quita del 7% en el poder adquisitivo de ese prometido fondo. Pero ya hay que comenzar a descontar la inflación que está corriendo este mes. Si el fondeo a las cooperativas no se implementa pronto ya se habría perdido el 10% de esos 1.000 millones de pesos.
Más allá de la espectacularidad de estas cifras, es una porte de apenas 4 millones de dólares oficiales para atender a un vasto sistema cooperativo que perdió muchísimo más por la seca y las políticas oficiales.
Laucirica se refirió, en este contexto, a las políticas que esperan del próximo gobierno elegido en las elecciones de octubre. “Necesitamos reglas, que haya previsibilidad y no tomen medidas intempestivas e inexplicables como el dólar soja que trajo más complicaciones que beneficios, o las restricciones del Banco Central a los créditos”.
El dirigente agregó que es necesario lograr una unificación cambiaria porque el desdoblamiento actual perjudica el ingreso de los productores. Otgro reclamo es la quita de los derechos de exportación o retenciones, “que son una de las políticas más retrógradas porque implican ir en contra de la promoción de la producción”.
“Pero más que todo lo que me dicen los productores es que es necesario reducir la inflación y la unificación cambiaria”, indicó Laucirica. Coninagro ya está sufriendo en carne propia ambos factores.