Desde Ginebra y Rosario, donde están las casas matrices de ambas empresas, Corteva y Bioceres anunciaron la firma de un acuerdo para mejorar la disponibilidad de productos biológicos en Europa, que en principio será orientado a la distribución de un “bioinsecticida innovador”.
“Corteva Agriscience y Bioceres Crop Solutions Corp han firmado un acuerdo exclusivo para avanzar la disponibilidad de soluciones biológicas en Europa. Según el acuerdo, Corteva y Bioceres trabajarán conjuntamente para acelerar los procesos regulatorios necesarios para llevar al mercado europeo un bioinsecticida de última generación desarrollado por la filial de Bioceres, Pro Farm”, se informó en un comunicado.
¿De qué se trata ese misterioso bioinsumo? No hay mucho detalle en el comunicado. Solo se dice que “el producto es un insecticida biológico extremadamente viable que puede ser tan efectivo como los insecticidas convencionales y se adapta bien a la agricultura convencional, con cultivos objetivo que incluyen maíz y otros cereales, así como semillas de girasol y colza”.
Por lo pronto, con la promesa a la vuelta de la esquina, el pacto implica que “una vez que se aseguren los registros, Corteva será el distribuidor exclusivo en Europa, a través de su equipo de Seed Applied Technologies y también tratará sus productos de semillas de la marca Pioneer con esa tecnología”. Además la multinacional seguirá comercializando Lumidapt de Pro Farm, un tratamiento de semillas para la nutrición del crecimiento de los cultivos. Se trata de “un nuevo tipo de fertilizante mineral orgánico para semillas, diseñado para mejorar la actividad metabólica, la fisiología y la mitigación del estrés de las plantas de manera proactiva”, según explica la propia empresa en esta web.
Matti Tiainen, presidente de Pro Farm, una subsidiaria de Bioceres que opera en Europa, explicó que “la demanda de soluciones efectivas con un perfil ambiental mejorado está creciendo rápidamente en Europa a medida que el entorno regulatorio se vuelve más desafiante y los agricultores buscan productos nuevos e innovadores para controlar las plagas y enfermedades que dañan el rendimiento”.
Jean-Philippe Riffat, líder de márketing de Corteva, añadió que esa firma “se compromete a proporcionar a los agricultores una amplia caja de herramientas de soluciones sostenibles para ayudar a garantizar un rendimiento productivo y rentable. Este acuerdo ayuda a satisfacer la demanda social y política de productos de origen natural, avanzando en nuestra misión de ofrecer productos innovadores”.
“Nuestras adquisiciones de Symborg y Stoller reflejan nuestro compromiso de invertir en productos biológicos, consolidando nuestra posición como líder mundial en el segmento. Y las tecnologías aplicadas a las semillas, como Lumidapt™ de Pro Farm, implican tratar la semilla directamente, ayudar a los agricultores a que sus cultivos comiencen de la mejor manera posible y reducir la huella ambiental de la agricultura”.