El ministro de la Producción, Dante Sica, rechazó con todas las letras este miércoles la posibilidad de que el Gobierno vaya a eliminar o reducir las retenciones que tributan las exportaciones de frutas, como reclamaban días atrás los productores de esas economías regionales en Plaza de Mayo. Pero a la par, su cartera promovió un decreto para incrementar los reintegros a la exportación de la industria automotriz.
No hay mucho más para discutir, parece. Es la historia que se repite. Hay hijos y entenados.
Son hechos. A través del Decreto 338/2019 publicado en el Boletín Oficial, el Gobierno aumentó a 6,5% el porcentaje de reintegros impositivos que le otorga a aquellas automotrices que exportan su producción a destinos dentro del Mercosur. “La medida, que equilibra la carga tributaria del sector para todo el mercado de exportación y que comenzará a regir a partir del jueves 9 de mayo de 2019, está orientada a reducir la carga impositiva sobre la exportación de vehículos”, se explicó en un comunicado del Ministerio de la Producción.
En los considerandos de la medida se reconoce que la baja de reintegros para ese sector industrial, producida en agosto de 2018 junto al resto de la economía, había provocado una “contracción” de las exportaciones de autos hacia los países de la región, especialmente hacia Brasil.
Sica dijo textualmente: “Trabajamos esta medida en base al diálogo permanente que tenemos con el sector y con los distintos representantes de toda la cadena de valor. Esperamos que la unificación de reintegros permita recuperar el dinamismo en el nivel de exportaciones y motorice un aumento en la producción de unidades previstas para el año 2019”.
El comunicado oficial destacó que “en 2018 el sector automotriz empezó a más de 60 mil trabajadores, que representaron el 6% del empleo industrial”.
Las actividades frutícolas demanda esa cantidad de mano de obra, o todavía más en tiempos de zafra. Pero al parecer las empresas y productores del sector no tendrán la misma suerte que las terminales automotrices. En el “frutazo” que hace dos semanas realizaron en Plaza de Mayo, los productores de peras y manzanas de la Patagonia norte, y los de cítricos de Entre Ríos, reclamaban una revisión del esquema de retenciones y reintegros a la exportación. estos últimos también les fueron rebanados en agosto de 2017, como a las automotrices.
Pero el mismo Sica que se autofelicitó por elevar esa devolución de impuestos a las fábricas de autos negó este mismo miércoles la posibilidad de tener un gesto parecido con esas economías regionales. Lo hizo en una entrevista que concedió al diario Río Negro.
-¿Qué le diría al sector de peras y manzanas que en los últimos diez años viene declinando no solo la exportación, sino la producción y creciendo el abandono de chacras?
–La primera vez que tuve un cargo nacional fue en 1996. Me acuerdo de que el segundo tema que me trajeron fue la crisis de las peras y las manzanas en el Alto Valle. Entre 2002 y 2003 fui secretario de Industria. De nuevo vino la crisis de las peras y las manzanas. Ahora vuelvo y me enfrento de nuevo a la crisis del sector. Estamos ante un tema estructural, tal vez agravado por la coyuntura, que la economía política no ha logrado resolver.
-¿Por qué no eliminan las retenciones?
-No se puede. Es un tributo transitorio para esta emergencia que estamos pasando.
-¿Y pasarlas de 4 a 3 pesos que es lo que corresponde para un sistema agroindustrial?
-No. Esas definiciones las tiene Hacienda. Terminamos el decreto para todo el sector Pyme. Las exportaciones que se hagan por encima del promedio del año pasado, no van a tener retención. Esta medida no va a reemplazar los montos que hoy paga la actividad, pero sí va a favorecer y va a dar un envión al sector y podrán tener una proyección distinta con respecto a sus exportaciones.
Sin desperdicios. Las dos caras de una misma moneda, el mismo día y por el mismo canal.