La lechería argentina es la responsable del sustento de muchos pueblos y ciudades, y es una economía dinámica con importante generación de empleo directo en tambos e industrias, y muchos más indirectos en la prestación de servicios anexos al sector.
En Carlos Pellegrini, Santa Fe, se llevó a cabo este viernes la segunda edición del “taller de embajadores de la cadena láctea argentina”, que tuvo lugar en la empresa tambera de la familia Chiavassa, un lugar en el que trabajan personas que sostienen económicamente a 80 familias, con el ordeño de 1.800 vacas por día, que resultan en 60 mil litros en cada jornada.
La bienvenida estuvo a cargo de Gustavo Mozeris como gerente; y Miguel Taverna como presidente de FunPel, al tiempo que también participó el dueño de casa, Cristian Chiavassa.
“No estamos comunicando todo lo bien que deberíamos respecto al aporte que hace la cadena láctea. Este tipo de reuniones con jóvenes nos muestra que tenemos muchas cosas positivas para mostrar”, indicó Taverna frente a más de 20 asistentes al encuentro.
El promedio de la tonelada de cualquier producto exportado argentino está en 500 dólares, mientras que la tonelada de lácteos promedia los 3.000 dólares. “Esto demuestra el plus que podríamos tener al exportar productos con mayor valor agregado, que contienen mano de obra especializada, bien paga, más vida para los pueblos y un mayor desarrollo en general”, explicó el titular de FunPel, agregando que “existe una apuesta en los jóvenes para multiplicar estos mensajes y generar un mejor posicionamiento de la cadena”.
Luego de la presentación institucional de FunPel y de la herramienta fundamental que significa el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA), para la obtención de datos unificados y confiables, se avanzó sobre algunos de los mitos que rondan al sector.
Sin monopolio en la producción de lácteos, a pesar de los mensajes confusos que bajan muchas veces desde la política, ya que entre las tres primeras empresas en el ránking nacional están a cargo de la generación del 30% de los productos totales puestos a disposición del consumo interno, se sumó también el cuestionamiento de la variabilidad de los precios respecto a los parámetros generales de inflación. La fijación de precios unilateral por parte de las industrias fue un punto de debate que descubre diferentes enfoques en una misma cadena.
La capacitación avanzó sobre conceptos para construir sustentabilidad y generar oportunidades sobre la base de una agenda propia y confiable, siempre dinámica.
“El sector tiene que trabajar en construir su legitimidad, tener su propia narrativa basada en consenso científico, potenciando el capital humano para atraer a futuras generaciones, siempre motivando en base a historias que inspiran”, señaló María Inés Rimondi, de la consultora Innovar Agro, la comunicadora a cargo de esta capacitación.
La jornada contó con ejercicios individuales y grupales para detectar fortalezas en la comunicación, no sólo de experiencias vinculadas al sector, sino incluyendo percepciones a partir de la recorrida de las instalaciones del sector de cría y en los galpones con cama de compost, dónde están los animales que dos veces al día se ordeñan en una calesita de 40 lugares.
El taller buscó motivar a protagonistas de diversas instancias de la cadena láctea a comunicar, a contar la tarea cotidiana, a entender las formas de responder a las demandas sociales y los planteos negativos de algunos sectores.
FunPel propone agrupar este tipo de mensajes con #laVidaLactea para generar conversaciones, ubicar respuestas de una manera más ágil, pero sobre todo fortalecer la forma de intercambiar mensajes no sólo para el interior de la cadena, sino para articularlas con el resto del segmento agropecuario y a nivel general en la comunidad.
Contar cómo es el sector, lo que se hace cada día, la manera de vivir a la lechería, desde el tambo, la industria, e incluso como consumidor de los productos que surgen de la bebida más completa disponible, es la mejor manera de explicitar los detalles de una actividad tradicional que avanza con innovación, tecnología y valor.