Hay muchas señales de que la “firmeza” será la característica distintiva este año en el mercado ganadero. Traducido: se vienen precios sostenidos.
El criador está conteniendo sus ventas de bovinos para el engorde para no tener pesos de más en la mano que no tengan destino cierto e inmediato. Además en los últimos dos años vendió bien los terneros y las vacas de descarte y por lo tanto no tiene urgencias.
Por otra parte hay pedidos de estas haciendas de parte de los recriadores y eso impulsa los precios.
En el medio quedan los feedlots que son los que de forma más rápida pueden poner a disposición ganado para la faena con destino al consumo interno, pero hace meses que las cuentas no les dan bien.
En el último informe de la Cámara Argentina del Feedlot, con datos a inicios de abril, se da cuenta de un resultado positivo de solamente 2.000 pesos sobre un valor de la hacienda terminada de 120.000 pesos, que es lo que ingresa por un novillito de 380 kilos que se vende a 320 pesos por kilo vivo.
“Eso habla de un empate técnico. La cuenta puede dar un poco positiva o negativa según cada negocio de compra, lo cierto es que la inversión es importante, los costos altos y falta capital para reponer”, dijo Juan Eiras, presidente de la Cámara de Feedlot.
En este escenario, el engordador agregó que el nivel de encierre aumento sólo 1,5% en marzo, para llegar al 58,5% de la capacidad instalada en los engordes intensivos. La ocupación en los feedlots más chicos es de sólo 34% y llega al 60% en los establecimientos más grandes. Esto en el marco de la zafra de terneros, que es el momento de más oferta del año.
Eiras indicó que no hay “voluntad de compra” de parte de los feedloteros: “Todo haría pensar que la invernada debería tender a bajar en lo que queda de abril por la alta oferta y la poca voluntad de compra que se evidencia en los encierres de los últimos meses, que no superan el 59%. Estamos todos tratando de cuidar los animales que tenemos. Sí es cierto que aumentó un poco el nivel de actividad de los matarifes para producir a futuro hacienda para el consumo y de los frigoríficos para contar con novillos para la exportación”.
Entonces, teniendo en cuenta que se está vendiendo invernada de forma escalonada, que los recriadores encerrarán la hacienda sobre fin de año para ponerla a disposición del mercado el año que viene con la clara intención de que cada animal sume kilos a bajo costo en los campos con pasturas y que los feedlots están cuidando sus niveles de encierres no queda otra que esperar un año con faenas moderadas.
De hecho, en marzo la faena cayó 11% internanual y eso hace prever un mercado firme a pesar de los problemas que tiene el consumo.