Arrancó la zafra de terneros. Los remates se suceden con volúmenes importantes, pero eso no implica que haya una oferta adecuada para la demanda presente. Por el contrario, los criadores se han recuperado de la seca y saben que su “moneda dura” es el ternero, por lo que tratan de vender sólo lo que necesitan y, como además logran colocar animales a buenos precios, no les hace falta desprenderse de cantidades importantes.
Además, lo que se comercializa termina mayormente en campos de recría, proceso que se volvió necesario para los ganaderos porque así pueden agregar kilos al menor costo posible antes de la terminación final en corrales, donde se pierde mucho dinero.
El último informe mensual de la Cámara Argentina de Feedlot indica que se pierden más de 1300 pesos por cabeza ingresada con 180 kilos y engordada hasta los 320 kilos en un corral. Se trata de una pérdida mucho menor a la registrada en los dos primeros meses del año, pero es una pérdida al fin.
En definitiva este año, entre la salida “en cuotas” de la oferta de terneros y los problemas que se acrecientan para los feedloteros con la suba del valor del maíz, promoverá una menor oferta de hacienda y a un ritmo de terminación más lento, lo que contribuirá –como viene sucediendo– a entonar los precios de la hacienda gorda.
Esa menor oferta de terneros se refleja en las estadísticas del Senasa recogidas por la analista María Julia Aiassa del Rosgan. “Analizando exclusivamente la categoría terneros y terneras, vemos que entre enero y febrero de este año se ha movido un total de 1.029.294 animales, número que resulta apenas 1,8% superior al movimiento registrado en igual bimestre de 2021”, explica.
Pero luego Aiassa destaca que la base de comparación es ya de por sí muy baja, porque “durante los primeros dos meses del año pasado resultó un 20% inferior al promedio de los últimos tres ciclos, debido a que, en primer lugar, la zafra de terneros se vio fuertemente reducida en 650.000 terneros y concomitantemente a esta situación se dio una restricción de oferta por parte de los criadores, quienes preferían quedar calzados en carne en lugar de pesos”.
Esa situación se está dando también este año y por eso la firmeza de precios que se observa en el mercado de la invernada. En el remate de la firma Colombo y Magliano realizado en Expoagro, por ejemplo, los terneros de 180 kilos se vendieron en un promedio de 386 $/kg, mientras que las terneras se vendieron en 360 $/kg. Hoy miércoles se está realizando un remate del Rosgan con precios también muy firmes.
El impulso del valor de estas haciendas está ligado además a los buenos precios de los granos, que permiten también a los productores mixtos derivar recursos hacia activos ganaderos.
En tal escenario la tendencia indica que la oferta ganadera en el transcurso del presente año seguirá siendo moderada, lo que implica que por los precios, a pesar de las intervenciones oficiales, seguirían siendo sostenidos en un contexto de elevada demanda tanto local como internacional.