Un matrimonio decidió dedicarse por completo a la difusión del mundo vitivinícola. Corría el 2005. Camilo de Lusarreta trabajaba como técnico audiovisual para Canal 8 de Córdoba,. Su mujer, Karina Rodríguez, se dedicada a su trabajo para un organismo del Estado. Hasta ese entonces se habían relacionado con la vitivinicultura desde la degustación y el interés por la “magia del vino”, según recordó Karina en una charla con Bichos de Campo.
Hoy competirán con este medio y nada menos que contra el programa agropecuario de La Nación Más por la estatuilla del Martín Fierro de cable al mejor Programa Rural. Representan orgullosamente al periodismo agropecuario realizado desde las provincias y que se transmite a través de Canal Rural.
La ficha les cayó un día: no había demasiada gente difundiendo la cultura del vino desde el interior del país. Esta revelación, más las habilidades técnicas de él y la capacidad de ella para las relaciones públicas, son las bases sobre las que este matrimonio fundó “Aromas del Terruño”, un programa dedicado a la difusión de la industria del vino en la Argentina y hasta en otras regiones del mundo. Entre ellas, una de sus favoritas e favoritos Napa Valley y Santa Bárbara, en California, donde están grabando actualmente.
Quince años después siguen siendo solo ellos dos quienes realizan el programa. “Eso nos permite viajar con más facilidad, o trabajar desde donde sea que estemos. Nuestra dinámica es: hacemos las entrevistas, Camilo las edita y yo hago la parte de relaciones públicas, logística e investigación previa del lugar que vamos a ir a conocer”, contó Karina.
Lo primero que recuerdan haber hecho fue un documental en Cafayate, Salta. “Era sobre unas tierras que se iban a dividir para quienes quisieran tener una bodega con su propia cepa de torrontes”. Hoy las propias bodegas los llaman a ellos cuando tienen un nuevo vino y hasta llegaron a ser corresponsales argentinos de una plataforma de vinos italiana, la “Wines Soundtrack”, dedicada a la misma tarea que ellos y que los convocó para difundir su programa desde su plataforma de podcast.
“Siempre hay material para comunicar”, dice Karina sobre lo que encuentran haciendo el programa, que también se ocupa de mostrar maridajes en los eventos que cubren, o nuevas técnicas que utilizan las bodegas, tanto en su espacio para elaborar el vino como en el campo donde cultivan las viñas. Ellos muestran todo. “Desde el ingeniero agrónomo hasta los tomeros, que son personas importantísimas de la viña y que madrugan a primera hora para dar agua a las viñas, especialmente en Mendoza”, especificó ella.
Si bien ellos eligieron ese proyecto como forma de vida y oficio, no deja de ser un camino sacrificado por la situación del país. “Hay veces que hay que poner mucho el hombro en un país que no acompaña tanto. Por ejemplo, quisiéramos viajar mucho más”. Pero aclaró que dentro de lo que pueden hacer, lo hacen a gusto.
“Lo que queremos comunicar con este programa es que en una sola botella de vino hay mucho más de lo que vemos. Viene de toda una tradición y trabajo de muchas personas. Está el enólogo, que es el hacedor del vino. Pero antes de él hubo todo un proceso de personas trabajando para que luego ese vino termine en esa botella en la mesa”, terminó por decir Karina.
Los comunicadores del vino que hoy compiten contra Bichos de Campo (Canal Metro) y LN Campo (LN+) por el Martín Fierro son un matrimonio que ya lleva 24 años juntos y trabajando en lo que les gusta. Considera que la nominación de APTRA a “Mejor Programa Rural”ya es una forma de salir ganadores.