Luego de conocerse la semana pasada un informe alcista del USDA, este lunes otra noticia favorable catapultó los valores internacionales de la oleaginosa y estaba casi todo listo para un “batacazo”. Hasta que apareció la Argentina.
Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Irak y Omán anunciaron que a partir de mayo y hasta fines 2023 aplicarán una reducción “voluntaria” de la producción de petróleo adicional a la acordada en la reunión de la OPEP de fines del año pasado.
Ese sorpresivo anuncio hizo subir de manera bestial los precios internacionales del petróleo, los cuales arrastraron al alza a los valores del aceite de soja en el CME Group (“Chicago”), que este lunes terminaron con subas intradiarias superiores a 25 u$s/tonelada en los contratos más cercanos. El aceite es el principal insumo empleado para la elaboración de biodiésel en EE.UU. (también en Brasil y Argentina).
Sin embargo, las posiciones más cercanas de harina de soja del CME Group finalizaron en la jornada de hoy con bajas intradiarias a causa del anuncio en la Argentina de la introducción de un nuevo régimen cambiario especial de “dólar soja”, el cual se espera que acelere los embarques argentinos de harina y aceite de soja.
Incluso descendió el valor del contrato Maíz CME Mayo 2023 ante la posibilidad de que el gobierno argentino –desesperado por divisas– implemente un régimen especial para favorecer las ventas del cereal por parte de los productores. Los anuncios formales de las nuevas medidas serían realizados el próximo miércoles por el ministro de Economía Sergio Massa.
El impulso alcista de los futuros de aceite de soja fue tan violento que el factor depresor argentino no afectó a las cotizaciones del poroto en el mercado de futuros de EE.UU., donde finalizó la jornada con subas intradiarias superiores a los 5,0 u$s/tonelada.
En cualquier caso, el “dólar soja”, que es una devaluación sectorial por tiempo limitado –delirio de política económica implementado en un país particularmente extraño como la Argentina–, no solamente afecta la formación de los precios de la oleaginosa en el país de origen, sino también a escala global.