Todavía en medio del baile por la Reforma Previsional propuesta por el Gobierno, también hay algunas polémicas por la segunda de las reformas, la impositiva, que están debatiéndose en el Congreso. En el caso del sector agropecuario. una de las piedras en el zapato es la rebaja propuesta en el IVA para la carne de cerdo y la de pollo, del 21% al 10,5%, como ya sucede con la carne bovina.
¿Por qué desata polémica una rebaja impositiva? ¿Cómo se entiende que haya productores que se quejen de esta medida si siempre piden que les bajen los impuestos? El experto en impuestos Alejandro Larroudé, de Barrero y Larroudé, explicó las razones en Bichos de Campo.
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Según el contador especializado en agro, muchos productores se quejan de la rebaja del IVA a la carne de cerdo. ¿Por que? Porque en la mayoría de los gastos que realiza ese productor (en alimentos o maquinaria) le cobran el 21% de IVA, pero cuando vende el cerdo va a estar grabado al 10,5%. Esto signifca que ese productor va a tener un saldo técnico a su favor que no lo puede computar nada más que contra el propio IVA. Quiere decir que si mes a mes sigue generando saldo técnico a favor se queda con un tema de iliquidez”, explicó. Quiere decir que paga más impuestos de los que recibe, en una cadena donde el IVA debería resultarle neutro.
¿Entonces quien se beneficia con la rebaja del IVA al 10,5%? Larroudé dice que debería ser el consumidos con una rebaja del precio final del producto, pero que esto no siempre sucede. “Sabemos que muchas veces este tipo de rebajas de impuestos al consumo y el que vende no lo baja, sino que aumenta su ganancia”, advirtió.
¿Y cómo se sale del brete de los saldos técnicos? Para el experto, una de las maneras, que ya se utiliza desde hace años en el negocio del feed lot (que sufre una situación similar, porque compra alimentos al 21% y vende la carne al 10,5%), es que el productor incremente sus inversiones para descargar ese saldo técnico del IVA que tiene a favor.
Pero, como solución de fondo, Larroudé cree que “la cuestión pasaría por hacer algo que no se hizo hasta ahora, y es que los saldos técnicos de IVA pudieran en alguna medidas compensarse contra otros impuestos”, como Ganancias o aportes patronales.
La otra opciónes que “permitieran su devolución”. En ese sentido, apuntó que en la propia Reforma Fiscal que analiza el Congreso hay un capítulo en el que permite que empresas o personas que compren un bien de uso y que acumulen saldo técnico por seis periodos consecutivos, puedan solicitar la devolución de los saldos técnicos de IVA.