No es una tarea fácil estar en el día a día de todo lo que sucede en el campo y a la vez dedicarle tiempo a los números. Son varios los casos de productores que intentan hacerlo y terminan dejando esa práctica porque no les resultó tan sencillo como parecía.
Este es el caso de Gustavo, un productor entrerriano que se dedica especialmente a la producción de arroz. Él se comunicó con Grupo Cencerro y lo primero que nos dijo fue: “Si mañana me pasa algo en la ruta no sé que le dejo a mi familia”. Con esa frase tan elocuente pero verdadera, comenzó nuestra relación.
Gustavo lleva la producción de la empresa familiar junto a su hermano Marcos. Su padre, ya retirado, les delegó la responsabilidad de continuar con el negocio. Al principio a ambos les costó y mucho adoptar la práctica de llevar adelante la gestión económica financiera. De a poco, con Gustavo como mayor interesado, fueron mejorando y eso rápidamente se reflejó en los números.
La realidad marca que ellos cuentan con campo propio y también con muchas hectáreas alquiladas. Además, con el tiempo han ido adquiriendo una importante cantidad de maquinaria propia. Estos factores complejizan la administración de los números, a la vez que la vuelven cada minuto más necesaria.
Entre sus unidades de negocio, en la agricultura se destaca la producción arrocera. Cuando hablamos del arroz debemos mencionar que es un cultivo que durante su gestación necesita estar bajo agua para ser protegido de malezas que puedan competir por nutrientes.
Debido a esto, Gustavo y Marcos tienen la necesidad de contar con motores que se encargan de sacar agua de los suelos para poder mantener el cultivo en cada uno de los cuadros dónde ha sido sembrado. Estos motores requieren de gasoil para funcionar lo que representa para la empresa importantes gastos de combustible al año.
Estos hermanos trabajan codo a codo hace muchos años y lo continúan haciendo pese a las situaciones a las que el fisco argentino los expone. Con una decidida postura en contra de las medidas tributarias impuestas al agro, entienden la importancia de gestionar como una herramienta de protección frente a los vaivenes de las medidas estatales. Es clave tener claridad en los números para saber cómo jugar en cada situación a la que estamos
expuestos.
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Los moviliza fuertemente el hecho de seguir incorporando hectáreas (propias y arrendadas) con el objetivo de crecer productivamente. Son conscientes de lo mucho que han cambiado las cosas desde que tomaron el control. Hoy cuentan con una importante cantidad de personal derivado de las necesidades que se van presentando a raíz de su ininterrumpida extensión territorial.
Mes a mes junto a nosotros, Gustavo, realiza el seguimiento periódico del negocio. Allí evaluamos lo que se vino haciendo en la empresa para saber bien qué decisiones tomar en la proximidad. La gestión se ha hecho parte de su rutina. Gustavo desde hace ya un tiempo piensa como gerente y eso cambió radicalmente su manera de trabajar.
Hoy reconoce que la mejora que ve en sus números se traduce en la tranquilidad que le brinda saber que tiene las herramientas para tomar las mejores decisiones en estos tiempos turbulentos.