La invasión de Rusia a Ucrania se transformó en el principal fundamento de la definición de precios en el mercado mundial de granos, pero en nuestro país esos movimientos tienen un reflejo parcial debido a la intervención en el mercado local por parte del gobierno nacional.
“Toda la atención parece puesta en el conflicto entre Rusia y Ucrania. Vamos a tener mucha volatilidad, por lo general habrá momentos de euforia, pero también otros en los cuales los precios bajarán. En estos casos la especulación cumple un rol fundamental, porque si en un día ganaste 10% ó 20%, también vas a estar tentado en salir” del mercado y hacer una toma de ganancias, explicó Diego de la Puente, analista de la firma Nóvitas.
De todos modos, el experto acotó que habrá otros factores que influirán sobre los precios de los commodities agrícolas, tales como el impacto del clima en Sudamérica y en Estados Unidos, el resultado económico final de la presente campaña 2021/22 y la relación insumo-producto al momento de diseñar las siembras del ciclo 2022/23.
Escuchá la entrevista a De la Puente:
Para el especialista de Nóvitas, además de la guerra hay que tener en cuenta otros factores que seguirán teniendo un peso importante en la definición de los precios. Mencionó, en primera instancia, el recorte productivo en Sudamérica como consecuencia de la sequía.
“El USDA (Departamento de Agricultura de los Eatados Unidos), en el caso de la soja redujo entre diciembre y febrero la producción en Sudamérica toda en 18 millones de toneladas, pero en Nóvitas calculamos que la pérdida ronda las 30 a 35 millones de toneladas”, ejemplificó.
Y agregó que “para el maíz el USDA hizo un recorte de 6,0 millones de toneladas, pero nosotros estimamos que va de las 12 a 15 millones de toneladas. En ambos casos el USDA es muy moderado, va reconociendo los recortes en dosis homeopáticas, regula el ‘timming’ con la intención de que no haya tantas variaciones” en las cotizaciones.
A ese recorte se agregan las proyecciones de clima seco en Estados Unidos, lo que podría afectar su producción. “La mayor parte de los estados del oeste del área agrícola del Medio Oeste de EE.UU. está seco y las proyecciones climáticas no son favorables”, indicó el analista.
El cuarto factor a tener en cuenta, según su análisis, es la relación insumo-producto. En esta campaña los productores pagaron precios que creían muy altos por sus insumos, pero que quizás sigan aumentando teniendo en cuenta que Rusia es un gran exportador mundial de fertilizantes y que el nuevo escenario geopolítico podría alterar la oferta de nutrientes de ese origen.
“Si esto mañana recrudece imagínate lo que puede pasar con Rusia, que es el gran exportador mundial de urea. Hay situaciones en las que el precio casi no es importante, sino tener el producto. Es como tener la cosechadora rota a un mes de la trilla y haya una sola persona en el país con el repuesto. ¿Cuánto vale eso entonces?”, preguntó.
De la Puente consideró que está claro que vamos a seguir en un mercado firme aunque con momentos también de alta volatilidad. “Mi recomendación es tomar coberturas, aprovechar los precios que hay, pero con la versatilidad suficiente para que, si el mercado sube, uno siga acompañado la mejora. Pero no hacer nada y esperar a que esto siga subiendo no lo recomiendo porque estamos en Argentina”, finalizó.