Se despertó la demanda en el Mercado de Liniers. En la última semana los compradores se anoticiaron de la menor oferta de hacienda con destino a la faena, especialmente en las categorías novillos y novillitos, y comenzaron a pagar mejores precios.
La suba que se viene consolidando en los últimos días indica una mejora en los promedios de esas categorías del 10%. Por la vaca ya había un interés marcado tras el regreso al mercado chino, que permitió una clara recuperación de las cotizaciones.
Para entender la suba hay que tener en cuenta que operadores del negocio de la carne indicaron que en las últimas dos semanas se dieron subas en la carne a salida del frigorífico de 20 pesos y otros 20 en la bajada a los carniceros. Esa mejora en los ingresos les permite pagar mejor la hacienda. O viceversa, la suba de la haciendo obligó a los matarifes a recomponer el precio de la carne en gancho.
El sector productivo estaba esperando esta reacción. Algunos indicaban que se daría hacia fin de año, pero por lo que viene pasando en Liniers la sensación es que se anticipó. Por los lotes livianos de feedlot se paga como precios corrientes 210 a 220 pesos el kilo vivo, cuando pocas semanas atrás le costaba llegar a los 205 pesos.
La mejora, según analistas como es el caso de Víctor Tonelli, podría llegar al 25%. Pero estos aumentos proyectados no serían suficientes para compensar el alza que vienen teniendo los terneros que van al engorde, lo que significaría que los feedlots seguirán perdiendo plata.
Pese a esta suba en los precios ganaderos, el retraso respecto de la invernada, que sigue siendo refugio de valor ante la incertidumbre política y económica, es notable. Los recriadores están pagando precios corrientes de entre 280 y 300 pesos por terneros de 180/200 kilos. El diferencial es de 35% con relación a la hacienda terminada.
En cuanto a la situación de los engordadores a corral, se acaba de difundir el informe que da cuenta de una nueva pero leve caída en los encierres que promediaron al inicio de noviembre el 60%. La baja fue de 1 punto porcentual respecto de octubre.
El índice de reposición es de 0,9, o sea que salen más animales de los que entran. Las empresas informaron que el 34% de los corrales está comprando y el resto en proceso de vaciado.
En cuanto al resultado económico, el margen bruto en un animal liviano es negativo en 4.400 pesos. Si no se da una suba continua y marcada en el sector feedlotero anuncian una mayor descapitalización de las empresas, especialmente de las que compran hacienda y granos. Quedan en carrera los establecimientos hoteleros copados mayormente por hacienda de matarifes y frigoríficos.
¿Qué hay detrás de la notable suba que está registrando la hacienda con destino a invernada?