Muy Bien Diez (10) Felicitado. Esa es la nota que se sacó hoy la cadena láctea durante una reunión que mantuvo con el ministro de Agricultura Luis Basterra.
El mercado lácteo –como casi todos los agroindustriales– se encuentra intervenido por el gobierno nacional. Pero las autoridades entienden que el “consenso” logrado en el sector lácteo es un ejemplo a seguir por el resto de los integrantes del ámbito agroindustrial.
Basterra destacó “el campo de acción conjunta del sector lácteo para generar un horizonte de crecimiento” a partir del “acuerdo lácteo” firmado a fines de mayo pasado entre la Secretaría de Comercio Interior y la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (Apymel), la Junta Intercooperativa de Productores de Leche (JIPL) y el Centro de la Industria Lechera (CIL).
De hecho, la reciente recuperación del precio recibido por los tamberos vino de la mano de la recomposición de la rentabilidad en la industria luego de que el gobierno nacional procediera, en el marco del “acuerdo lácteo”, a flexibilizar el “cepo” vigente tanto en el mercado local como externo.
Eso se logró gracias al compromiso de las industrias lácteas por vender ciertos productos básicos a precios subsidiados a cambio de que el gobierno no interfiera en los precios del resto de los productos lácteos ni en las exportaciones.
La consecuencia de ese “acuerdo”, que en realidad fue una imposición indirecta para mantener abierta la posibilidad de exportar, es que los lácteos con precios “liberados” se transformaron en un artículo de lujo, como pueden ser el caso de los quesos semiduros y duros.
No podría ser de otra manera, porque al subsidiar con recursos propios los precios mayoristas de ciertos productos de consumo masivo, la pérdida que esa imposición genera debe ser compensada con aumentos extraordinarios en el resto de la canasta de lácteos. No existe magia en economía.
Afortunadamente, en el último año se registró un clima mayormente benigno en las principales cuencas lecheras, el cual permitió sostener productividades de leche sin tener que recurrir al uso intensivo de granos o balanceados.
En ese marco, la oferta de leche viene creciendo junto con la mayor eficientización de las empresas tamberas sobrevivientes a cada fase de crisis de precios –las cuales vienen siendo cada vez más recurrentes–y golpes climáticos.
En la jornada virtual coordinada por Basterra participaron los presidentes del CIL, Ercole Felippa; de la JIPL, Danny Lorenzatti; y de Apymel, Pablo Villano; junto con representantes de La Lácteo, Mastellone Hnos, Brawley, Nestlé, Verónica, Molfino (Saputo), García Hnos (Tregar), La Ramada, Capilla del Señor, Tonutti, Punta del Agua, Canut, Lactear, Pampa Cheese, La Sibila, Alfredo Williner, Vacalin, Santa Clara, SanCor, Manfrey, James Craik, AUT, San Isidro y Charles Gide, entre otras.
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