La noticia es mucho más que la noticia. Bioceres Crop Solutions Corp., una corporación nacida en la Argentina con proyección global, anunció que adquirió un 6% del capital social de una firma radicada en el Reino Unido que tiene en carpeta varios proyectos para producir proteínas a través del uso de plantas como biorreactores (molecular farming).
Repasemos. No estamos hablando de darle maíz a un novillito para que lo transforme en carne. Estamos hablando de modificar genomas de plantas para que los mismos expresen proteínas animales funcionales.
Eso, que parece una locura, ya lo hizo algunos años atrás Indear, una empresa creada por Bioceres en alianza con el Conicet, que logró diseñar plantas de cártamo que expresan quimosina, una enzima naturalmente presente en estómagos de rumiantes que es usualmente elaborada con bacterias recombinantes (modificadas genéticamente) y que se emplea para la elaboración de quesos.
La inversión para tomar una participación del 6% en Moolec Science Ltd., la empresa dedicada a desarrollos de agricultura molecular, tiene como propósito posicionar a la corporación biotecnológica en la carrera de empresas que están buscando sustitutos cárnicos por métodos alternativos.
Mientras que algunos emprendimientos –como Mosa Meat, Memphis Meat o Aleph Farms–están buscando diseñar tecnologías para cultivar células animales en biorreactores, la propuesta Moolec es emplear a las mismas plantas como “fábricas” biológicas de proteínas a partir de las cuales elaborar sustitutos cárnicos, lácteos y de ovoproductos.
La razón por la cual la acción de Bioceres (BIOX) en el mercado bursátil estadounidense NYSE subió hoy más de un 11% es precisamente esa: muchos inversores interpretaron que la compañía se subía a la ola de emprendimientos que están buscando crear alternativas económicamente viables para producir proteínas cárnicas sin necesidad de faenar animales.
Además de Bioceres, en Moolec también invirtió la compañía agrícola uruguaya Union Agriculture Group, una de las más importantes de la nación oriental y gestionada por la famiia Sartori.