La empresa Díaz & Forti, perteneciente al Grupo Olio y operadora, en el marco de un contrato con Vicentin SAIC, de las plantas industriales que tiene la compañía concursada, hace una semana que no puede trabajar por haber sido dado de baja del Registro Único de la Cadena Agroalimentaria (RUCA) por parte de las autoridades del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca. Esto, a instancias del Banco Central, que le reclama a la cerealera liquidaciones de divisas pendientes por unos 450 millones de dólares.
Fernando Jurando, CEO del Grupo Olio, cree que la semana que viene este requerimiento será subsanado. “Hasta fines de año estamos operando la planta industrial de San Lorenzo de Vicentin, haciendo molienda de soja, y también el puerto; desde el año que viene se incorpora además la planta de Ricardone para molienda de girasol. Hay un contrato firmado y homologado por el juez (concursal Fabián Lorenzini) en septiembre pasado”, indicó hoy a Bichos de Campo.
“Al cabo de este año habremos procesado y embarcado aproximadamente 3 millones de toneladas, de las cuales el 60-70% serán a través de molienda y el resto como grano. Para nosotros es un volumen significativo, pero no somos uno de los jugadores grandes”, añadió Jurado.
– Quedaron fuera del RUCA. ¿Qué pasó? ¿Por qué? ¿Hay problemas con las liquidaciones de divisas de exportaciones?
– Por segunda vez (quedamos fuera) un viernes anterior a un fin de semana largo; la primera vez nos dieron de baja del RUCA argumentando que nosotros habíamos elevado poroto de soja en plantas de Glencore (Oleaginosa Moreno) y Cofco y que en realidad había sido aceite o harina, para lo cual, como medida, la requisición que hizo la Secretaría de Agricultura (de la Nación) fue darnos de baja del RUCA y luego preguntarnos. Ya esta demostrado, comprobado y documentado, incluso por Cofco y Glencore, que elevamos poroto, por lo tanto se cometió un error que nos costó rechazar 1500 camiones ese fin de semana con el costo de flete y contratiempos con los productores, que luego fue normalizado. El error fue administrativo de la Secretaría (de Agricultura), porque hay cartas documento de las otras empresas, que muestran que fueron bien reportadas. La segunda vez surge el 3 de diciembre a raíz de la resolución del 1 de diciembre (132/20), que establece que la Secretaría también puede intervenir a través de la baja del RUCA cada vez que una empresa incumple con la Secretaria, la AFIP o con el Banco Central (BCRA).
– La resolución 132 que dice que las empresas que no liquiden divisas en los plazos correspondientes no pueden permanecer en el RUCA.
– La resolución es para cualquier empresa que haga exportaciones agroindustriales. Lo extraño de esto es que la resolución salió el 1 de diciembre, el 2 de diciembre sale una nota de la Secretaría al Banco Central preguntando específicamente por Díaz & Forti y no por todas las empresas que exportan; ese mismo día el BCRA le responde que había incumplimientos de nuestra parte y el día 3, sin medir intimación ni pregunta desde la Secretaría, se nos da de baja del RUCA, hasta este momento en el que estamos haciendo las diligencias para poder levantarla. Lamentablemente y nuevamente, lejos de actuar como debería o como lo hace normalmente, que es bajo requisitoria –donde uno corrige lo que este mal– primero se ejecuta y luego se pregunta.
Escuchá la entrevista con Fernando Jurado:
– Se los acusa de no haber hecho en tiempo y forma la liquidación de divisas por exportaciones. ¿Incumplió la empresa?
– Cambiaría la palabra acusación porque no tenemos ningún expediente ni acción administrativa en el Banco Central más allá de que hemos tenido y tenemos algunas discusiones y regularizaciones respecto de la liquidación de divisas, no de la magnitudes que manifiesta el Banco Central, pero sí me preocupa la ejecutividad con que la Secretaria de Agricultura actúa con el RUCA, porque creo que lo hace de forma selectiva y discrecional y eso lo dimos en llamar la “Operación 1-2-3”, porque el 1 sale resolución, el 2 sale una nota de la Secretaría de Agricultura al Banco Central, el Central le responde y el 3 la Secretaría “aprieta el botón” y con eso noto un trato no justo ni igualitario y ahí sí realmente creo que hay algún exceso de parte de las autoridades.
– ¿Reconoce entonces que hubo demora en liquidación de divisas de parte de la empresa?
– Siempre hay diferencia en la liquidaciones de divisas y siempre hay un dialogo permanente con el BCRA referido a las diferentes liquidaciones que se dan, porque el cliente paga más tarde, porque hay una diferencia entre lo que se exportó y lo que el cliente quiere pagar, por una diferencia de calidad, por demora en el embarque, (entre otros factores); eso es moneda corriente y en general esto se manejó en tono muy dialoguista del BCRA, porque todos dependemos de este modelo de prefinanciación y queremos liquidar las divisas; de ahí a querer abogarse la perfección, estamos lejos de eso, pero que nos pongan como incumplidores seriales es injusto y exagerado.
– ¿Cuál es el monto de divisas que tienen atrasado en cuanto liquidación?
– Hay liquidaciones por debajo de los 200 millones de dólares que se están regularizando, que no quiere decir que hay 200 millones de dólares pendientes de regularizar. No te olvides en que cada embarque son entre 15 y 20 millones de dólares. Por lo tanto, si tengo diferencias es de 200.000 dólares en un embarque de 20 millones, que es el embarque total, pero la liquidación total es la que está cuestionada.
– El gobierno dice que ustedes adeudan una liquidación de divisas de cercana a 400 millones de dólares.
– El gobierno dice eso, pero si vamos a terminar exportando 600 millones de dólares, te podrás dar cuenta de que prácticamente el 60% a 70% de las exportaciones del año no fueron liquidadas, no, por lo que el monto es absolutamente inexacto.
– ¿El monto que manejan ustedes es de cuánto?
– Para nosotros el monto es muy por debajo de la mitad de lo que el gobierno está diciendo, pero no es el gobierno, sino el Banco Central.
– ¿Están subsanando el problema? ¿Cuál es el mensaje que quieren darle a los productores que comercializaron mercadería con ustedes?
– Es bastante claro. Desde la semana anterior de esta resolución tuvimos reuniones con el Banco Central en la que mostramos cómo íbamos a regularizar esto. La resolución que toma la Secretaría respecto del RUCA es como que va en camino paralelo con lo del Banco Central. La Secretaría se toma atribuciones para darnos de baja del RUCA, pero no tiene acción sobre el Banco Central; no sé cómo seguirá el tema administrativamente en forma interna. Nosotros, respecto de los productores, todos los contratos los estamos cumpliendo. Desde el punto de vista del productor, no hay nada que los esté impactando y, en paralelo, estamos llevando adelante todas las medidas para estar activos con el RUCA; esperábamos ayer tenerlo resulto ayer, pero creemos que será entre el lunes y martes próximo.
– ¿Alguien se beneficia con la salida de Díaz & Forti? Porque entiendo que para originar granos pagaban precios por encima de los del promedio del mercado. ¿Ven alguna mano rara?
– Primero y principal, nosotros movemos mucho grano a través de la Bolsa y sí, es cierto que para completar un barco alguna vez hacemos una operación sobre 2000 ó 3000 toneladas a precio más alto. Pero todas las empresas grandes que tienen que hacer programas de carga pagan “primas” para tener preferencia de volumen y esto pasa por afuera de la Bolsa y las mismas corredoras que se quejan en el mercado, son las que aceptan vender a estos precios más altos que, bueno, protegen muy bien al productor. En lo que es pagar precios más altos o más bajos, lo que me extraña es que estamos en un mercado defendido por empresas y corredoras que, cuando ven un precio alto, se quejan, entones, ¿a quién defienden? ¿Al productor o a sus propios intereses?
– Que salga del negocio una empresa que opera las plantas de Vicentin, ¿no genera más concentración del negocio?
– Definitivamente: tenés 15% de capacidad instalada que sale del mercado. Solo para darte un ejemplo concreto: los dos viernes previos a los fines de semana largo –a los hechos me remito; busquen la información– esos dos viernes todo el mercado salió a pagar 10 dólares (por tonelada) menos la soja.
– Si parte de la industria se ve beneficiada con la salida de Díaz & Forti, ¿se puede suponer que hay funcionarios que le hacen el juego a esas industrias aceiteras?
– Creo que hay más una animosidad contra la empresa y el directorio de Díaz & Forti, pero daría la impresión de que nadie se preocupa por todo el impacto que tiene en el universo: productor, corredor, camionero, periféricos y familias que trabajan en las mismas. Es como una respuesta perversa disfrutar con la caída de alguien cuando no se ven los efectos colaterales. Definitivamente, hay capacidad instalada ociosa en el país y definitivamente sí pueden hacer cosas por error, omisión o intención para que esa capacidad no vuelva a entrar en el mercado; eso va a mejorar los márgenes del resto de la industria. Me parece aventurado acusar, pero trato de ser observador y me daría la impresión de que en los hechos parece que prefieren que la empresa muera por falta de oxígeno y atacamos entonces al fabricante del tubos de oxígeno.