Un informe de la Subsecretaría de Mercados Agroalimentarios dio cuenta de que en el mes de octubre pasado la Argentina terminó de cumplir con su cuota de exportación de carne vacuna a Estados Unidos, completando las 20 mil toneladas que ingresan con aranceles ventajosos. Del negocio participaron 13 plantas frigoríficas que lograron ventas por 95 millones de dólares.
“Luego de 20 años fuera del mercado, la República Argentina ejecutó la totalidad de su cuota de carnes vacunas a los Estados Unidos de América, equivalente a 20.000 toneladas peso producto”, celebró el área oficial conducida por Javier Preciado Patiño. Luego se recordó que la crisis de la aftosa de 2001 mantuvo a los exportadores argentinos lejos del mercado norteamericano por casi dos décadas. “Recién en 2019 volver al ruedo como país proveedor regular de carnes”, se remarcó.
Pero el año pasado no pudo cumplirse con todo el volumen y esta vez sí, de modo bastante acelerado además. En el mercado estadounidense la Argentina compite con Uruguay, Australia, Canadá y Nueva Zelanda, “que ya se encontraban bien afianzados en el paladar de los consumidores americanos”.
Más allá de que se cumplió con el volumen de exportaciones previsto, todavía queda mucho por crecer para agregarle valor al producto enviado. De hecho, según los datos oficiales, del total de 20.000 toneladas exportadas, medidas en valor FOB, el 52% correspondió a cortes del cuarto delantero, el 42% a cortes del cuarto trasero, y el 6% restante a recortes de troceo.
Medido en volumen, los cortes más baratos del cuarto delantero del bovino representaron 56% de los envíos versus el 37% para los cortes del cuarto trasero, que suelen ser más caros.
Respecto de los cortes del cuarto delantero, medidos en valor FOB, el 98% correspondió a carne congelada, en tanto que sólo 2% fue carne fresca o refrigerada, principalmente bife ancho.
La distribución de los cortes del cuarto trasero resulta mucho más interesante, respecto del posicionamiento de las ventas en el mercado americano. Medidos en volumen, el 34% correspondió a carne enfriada, en tanto que el 66% restante a carne congelada. Los porcentajes se incrementan para la carne enfriada, medidos en valor FOB, esto se debe al mayor valor de los cortes enfriados del cuarto trasero.
Define el informe oficial que “el cálculo del precio promedio de venta arroja que los mismos rondaron los 4,77 dólares el kilo, ubicándose los cortes del cuarto trasero por encima de ese valor y los cortes del cuarto delantero y recortes por debajo. La excepción fue el bife ancho que siendo un corte del cuarto delantero, alcanzó los 7,9 dólares por kilo”.