En Rosario comenzó el 111° Congreso Anual Ordinario de Federación Agraria Argentina (FAA), bajo el lema “La unidad es nuestra siembra; el futuro, nuestra cosecha”. Frente a un auditorio lleno de dirigentes políticos, legisladores, ministros provinciales y autoridades del sector, la presidenta Andrea Sarnari abrió el encuentro con un discurso cargado de reclamos y advertencias.
“Desde FAA trabajamos incansablemente para poner en agenda temas centrales como la reforma impositiva integral y progresiva, la eliminación de retenciones, el financiamiento accesible, la infraestructura necesaria, el acceso a la tecnología, el seguro multirriesgo, la educación rural, la atención de las emergencias y la trascendencia de consolidar las economías regionales”, dijo.
La presidenta de FAA volvió a apuntar contra las retenciones y los impuestos que pesan sobre la producción, en medio del contexto histórico. A la presidenta de la entidad le tocó abrir el congreso justo cuando crece la polémica respecto a la medida de “Retenciones 0” del gobierno, que duró apenas tres días y encendió el malestar de los productores agropecuarios.
“Se debe continuar con la reducción de la carga fiscal. Las retenciones son un claro ejemplo de eso. No sólo se trata de reducir esa carga impositiva, también es necesario que una reforma integral avance en la eliminación de otros impuestos distorsivos, como el anticipo de ganancias, el impuesto al cheque, los saldos técnicos de IVA. Más de 23 años de retenciones demuestran el uso discrecional de esos recursos: ese dinero no volvió a los pueblos ni en obras ni de ninguna otra manera”, disparó la ruralista.
Sarnari advirtió que la eliminación de retenciones debe ser “escalonada pero firme”, y reclamó previsibilidad: “Lo transitorio de las medidas perjudica la previsibilidad. Los pequeños productores no somos beneficiarios de las medidas que se tomaron el lunes. La transferencia de recursos es a beneficio de los grandes y no del pequeño productor. Lo que necesitamos son reglas claras”.
También exigió inversión en caminos rurales y rutas: “Nuestros caminos rurales en la mayoría de los lugares son precarios. Nos imposibilitan la vida normal y digna. Es el Estado, en su mejor versión, el que debe atender esos lugares, fundamentalmente los más alejados, los menos transitados. No puede un país como Argentina abandonar la inversión en infraestructura”.
Otro de los ejes del discurso fue el acceso al crédito. “Necesitamos acceso al crédito real, con tasas acordes a la producción, a los pequeños y medianos productores y a las PYMES. Una señal clara son los créditos a valor producto que se han lanzado, pero una vez más, los pequeños productores quedamos afuera de las posibilidades”, sostuvo.
Sarnari, a su vez, defendió a los organismos del agro. En su discurso vociferó: “El INTA es uno de ellos, y hemos pasado un año signado por el incansable trabajo gremial para sostener la herramienta y la institucionalidad. Lo seguiremos haciendo, porque su rol de desarrollador de soluciones regionales no será suplido por nadie. También está el Banco Nación, que debe volver a estar al servicio del sistema productivo, y el SENASA, donde necesitamos mucha presencia”.
La presidenta de Federación Agraria advirtió sobre la crisis que atraviesan las producciones de escala más chica, a lo largo y ancho del país: “Las economías regionales atraviesan una crisis severa, que atenta directamente contra la existencia de pequeños y medianos productores, de nuestras cooperativas, y de nuestras PYMES. La apertura indiscriminada de importaciones, la alta presión tributaria, los altos costos de las cargas sociales, la falta de créditos y de infraestructura atentan contra ellas”.
Justo ahí, lanzó su advertencia más fuerte: “No vamos a permitir que un productor más desaparezca, lucharemos hasta el final para que eso no suceda. Ahí nos encontrarán, buscando soluciones, la salida y el progreso. Igualmente, la Agricultura Familiar merece su lugar en la agenda de las políticas públicas”.
Sarnari también pidió un país más equilibrado. Ante la mirada de autoridades nacionales y provinciales, exclamó: “Reafirmamos que la Argentina que soñamos es una Nación con desarrollo equitativo y federal, donde los pueblos del interior tengan las mismas oportunidades que las grandes ciudades y donde la producción esté en manos de quienes viven y trabajan la tierra”.
Y remarcó: “No vamos a descansar hasta lograrlo, porque nuestra voz es la de miles de productores que día a día se levantan antes de que salga el sol para trabajar la tierra, y esa voz, como hace 113 años, va a seguir gritando, fuerte y clara”.
Tras el discurso de Sarnari, el subsecretario de Producción Agropecuaria y Forestal, Manuel Chiappe, planteó que “la Argentina está atravesando cambios profundos y estructurales, con reducción de trámites y burocracia, de la inflación. Sobre todo, estamos en un escenario de economía estable”. Reconoció que “no es suficiente, pero las medidas van hacia allí” y llamó a “tener una mirada de largo plazo”.
Chiappe destacó el trabajo con las provincias: “Venimos buscando construir puentes con reuniones mensuales del CFA, trabajando región por región. Seguimos poniendo la SAGPYA a disposición de todos ustedes. Vienen muy buenos momentos para nuestro querido país”.
Finalmente, el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, se sumó a los reclamos: “Aprovecho este ámbito para volver a pedirle al Estado Nacional que el federalismo no esté sólo estampado en la norma; que se pueda cumplir y se pueda llevar adelante”.
El mandatario recordó sus raíces: “Soy hijo y nieto de productores agropecuarios que lograron comprar una pequeña porción de tierra. Nos quedó la cultura del trabajo y del esfuerzo, que nadie te debía regalar nada porque vos te lo podías ganar”.
Y fue contundente: “Reclamamos que se terminen las malditas retenciones porque es no entender el rol que tienen las familias agropecuarias en cada comunidad. En Argentina los dirigentes necesitamos tener más humildad porque ninguno va a salir solo. Por eso necesitamos sentarnos en una mesa y lograr acuerdos políticos”.