Mientras que los precios de la soja, luego de la implementación del régimen de suspensión temporaria de derechos de exportación, mejoraron de manera notable pero se mantienen lejos de la paridad teórica, en el caso del maíz los valores del cereal ya están libres de retenciones, algo que no sucedía desde hace casi un cuarto de siglo.
Este martes el contrato Maíz Rosario Septiembre 2025 del mercado A3 terminó en un promedio de 193,0 u$s/tonelada con una suba intradiaria del 3,7%, mientras que la posición Diciembre 2025 finalizó en 190,0 u$s/tonelada con un alza del 1,3%.
Si bien no tiene lógica alguna que la posición diciembre tenga un precio inferior a la de septiembre, el particular diseño del régimen de suspensión de retenciones explica tales distorsiones.
De todas maneras, ambos contratos, al considerar lo valores FOB vigentes, ya están completamente libres de derechos de exportación, lo que representa un hecho histórico, ya que la generación de empresarios agrícolas sub-40 es la primera vez que experimentan un suceso de tales características.
En lo que respecta al cereal de la nueva cosecha 2025/26, el Maíz Rosario Abril 2026 A3 cerró este martes en 178,5 u$s/tonelada con una suba intradiaria de 0,2%. En este caso, considerando el valor FOB de esa posición, la retención efectiva se mantiene en el orden del 5,0%, lo que implica que los exportadores que planean optar por el régimen promocional –que expira a fines de octubre próximo o al acumular agrodivisas por 7000 millones de dólares– están planificando colocar la mayor parte de los embarques con retención cero en lo que queda del presente año.
En cuanto a los futuros de soja, este martes el volumen negociado volvió a destacarse, aunque no en niveles récord como los registrados ayer lunes.
El contrato más negociado fue el de Soja Rosario Noviembre 2025 con un alza del 0,1% y un valor de cierre promedio de 360,5 u$s/tonelada. En este caso, considerando el valor FOB, la retención efectiva se ubica en más del 6,0%.
También se destacaron las operaciones de venta de soja de la nueva campaña, con negocios por 328.500 toneladas de poroto correspondiente a las posiciones Mayo y Julio 2026.
Luego de ser eliminadas durante la década del 90 (con excepción del poroto de soja, que siguió mantuvieron en un 3,5%), las retenciones a las exportaciones hicieron su reaparición en febrero de 2002. Inicialmente, las alícuotas fueron de 10% para trigo y maíz y de 13,5% para soja y girasol, mientras que los productos procesados pagaban el 5%. Luego, en abril de ese año, los porcentajes subieron a 20% en cereales y 23,5% en oleaginosas respectivamente, mientras que harinas y aceites de soja y girasol comenzaron a tributar un 20%.